Esto, para ampliar y modernizar la central hidroeléctrica argentino-paraguaya ubicada sobre el río Paraná, al norte de la provincia de Corrientes, según indicó el director ejecutivo de ese organismo, Humberto Schiavoni.
La Entidad Binacional Yacyretá (EBY) pondrá en marcha un plan de inversiones por más de US$1.650 millones, para ampliar y modernizar la central hidroeléctrica argentino-paraguaya ubicada sobre el río Paraná, al norte de la provincia de Corrientes, según indicó el director ejecutivo de ese organismo, Humberto Schiavoni.
La Entidad Binacional Yacyretá (EBY) pondrá en marcha un plan de inversiones por más de US$1.650 millones, para ampliar y modernizar la central hidroeléctrica argentino-paraguaya ubicada sobre el río Paraná, al norte de la provincia de Corrientes, según indicó el director ejecutivo de ese organismo, Humberto Schiavoni.
“Con el ordenamiento de las cuentas que está previsto, podemos establecer un flujo de fondos para hacer frente a la inversión. También se está preparando el proyecto para la ampliación de la central”, dijo el director ejecutivo de Yacyretá, Humberto Schiavoni y agregó que “con lo previsto, pondremos en marcha inversiones por más de US$1.650 millones”.
En una entrevista publicada este lunes por el diario La Nación, el ejecutivo explicó que como parte del plan de inversiones “se agregarán tres turbinas adicionales”, y destacó que “eso incrementará en un 15% la potencia y en un 6% la generación efectiva, que va a permitir trabajar en hora pico”.
El funcionario precisó que eso “costará alrededor de US$1.000 millones”, y puntualizó que la idea para llevarlo a cabo es que “los oferentes propongan el financiamiento”.
Además, indicó que “este semestre” se lanzará la licitación para la construcción de un proyecto en el brazo Aña-Cuá, que demandará “una inversión de US$650 millones”, y remarcó que “incrementa la generación efectiva en un 10%”.
Agregó que “el otro proyecto que está en marcha es el programa integral de rehabilitación y modernización de la central”.
“Las turbinas están golpeadas por haber trabajado años a una cota diferente de la de diseño. Eso llevará 10 años”, estimó Schiavoni, quien subrayó que “en cuatro años tiene que haber una reducción de gastos” de la central.