Se trata del Banano QCAV4, una variante oriunda de Taiwán y diseñada a través de bioingeniería para resistir al Fusarium Raza 4, responsable del marchitamiento y muerte de las plantas.
El sector bananero de Ecuador analiza importar la primera variedad resistente al Fusarium Raza 4, llamada banano QCAV-4, que se evalúa en Australia, donde se detectó el hongo en 2015. Si esta nueva variedad pasa las pruebas en ese país ofrecería una red de seguridad contra la plaga que afecta a las plantaciones del banano y otras musáceas, destacó José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano de Ecuador (AEBE).
La plaga ya está presente en la región desde 2019 cuando fue detectada en Colombia, en 2021 llegó a Perú y en enero de este año Venezuela confirmó la aparición del hongo. Ecuador aún no reporta la enfermedad.
En tanto, el sector bananero ecuatoriano, a través de su clúster bananero, ya ha importado una variedad, pero tolerante a la plaga, que es el formosana 218, que se concretó a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad) y el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap).
La variedad formosana 218 es originaria de Taiwán y ya está siendo usada en Filipinas y países de Centroamérica como Honduras y Costa Rica. Además, está en trámite la importación de otra variedad tolerante, el gal de Israel.
La llegada de esta variedad tolerante se dio luego de haber cumplido con la normativa legal vigente de la Ley Orgánica de Sanidad Agropecuaria (LOSA) y de la Ley Orgánica de Agrobiodiversidad, Semillas y Fomento de la Agricultura Sustentable (Loasfas).
Mientras, los bananos QCAV-4, desarrollados en asociación con el Gobierno ecuatoriano y la industria de Australia, se han cultivado en pruebas de campo en el Territorio del Norte en ese país durante más de seis años y han demostrado ser altamente resistentes a la enfermedad del Fusarium, informó AEBE a través de un comunicado.
La nueva variante de banano está siendo evaluada actualmente por las autoridades reguladoras del Gobierno australiano, la Oficina del Regulador de Tecnología Genética (OGTR) y las Normas Alimentarias de Australia y Nueva Zelanda (FSANZ). Si el Gobierno australiano aprueba esta variedad estaría disponible en unos cinco años.
Las reglas de bioseguridad de clase mundial de Australia hasta ahora han limitado el impacto de la enfermedad de raza 4 en la mayoría de la industria australiana, sin embargo, se ha encontrado en partes del norte de Queensland y ha diezmado la industria comercial del banano del Territorio del Norte.
Por su parte, Hidalgo indicó que el país necesita tener la mayor cantidad de variedades probándose en suelo ecuatoriano por los debidos procesos de bioseguridad y de ingreso que se deben manejar, para a futuro ver las reacciones que tienen estas variedades en torno a la productividad, sabor y que se adapte al suelo ecuatoriano.
“Esta nueva variedad llegaría al país dependiendo de las gestiones que haga el MAG, hay las opciones afuera. Hay que hacer las gestiones, hoy solo hay una variedad en el país formosana 218, y hay otras afuera que justamente motivan a tener la mayor cantidad probándose”, agregó el dirigente.
No obstante, si bien la aprobación regulatoria de OGTR y FSANZ respaldaría la seguridad ambiental y alimentaria de QCAV-4, no hay planes para cultivar o vender bananos QCAV-4 a los consumidores en Australia en este momento, explicó AEBE.