El sistema matemático permite estudiar qué condiciones de las diferentes áreas afectan la dispersión del virus y cómo contenerlo.
Las matemáticas usualmente se implementan en el cuidado de la salud y la investigación médica. Atraviesan diferentes áreas, desde la administración hasta el campo bio-farmacéutico y puede, además, usarse para predecir la dispersión de enfermedades y prevenir epidemias.
Esto último es lo que hace el modelo llamado Sir-Network, que investigadores aplicaron al dengue, enfermedad transmitida por mosquitos que afecta con fuerza a Latinoamérica, México y algunas zonas de Estados Unidos, así como también a África. El estudio, publicado en SIAM Journal of Applied Mathematics, muestra una manera de entender la dinámica de la epidemia dentro de una zona urbana.
De acuerdo con la investigación, algunos vecindarios están cercanos a lugares con agua estancada, lo que permite que se formen grandes grupos de insectos. No obstante, debido a que los mosquitos vuelan sólo algunos cientos metros desde el lugar de su nacimiento, un ser humano infectado tiene más posibilidades de acarrear el virus hacia lugares más lejanos. Todas ellas son variables que el SIR-Network considerará para predecir el comportamiento de la enfermedad.
"El modelo puede usarse para predecir si las intervenciones locales, como el aseo de las aguas estancadas, pueden modificar la prevalencia del dengue en la ciudad completa", dijo el coautor del estudio, Daniel Coombs. "Entregamos fórmulas que describen si es probable una epidemia, en términos de patrones de viajes de seres humanos entre vecindarios, poblaciones de mosquitos e índices de mordedura".
Como parte del artículo, los investigadores aplicaron el modelo a datos recogidos durante y después de la epidemia de dengue en 2007 en Río de Janeiro, Brasil, con lo cual descubrieron patrones interesantes. Por ejemplo, los índices de transmisión llegaron a su punto más alto entre 6 y 8 semanas antes del peak de incidencia de Dengue. Adicionalmente, determinaron que el lugar más importante en la dispersión del virus era el centro de la ciudad.
"Creemos que nuestros resultados resaltan la importancia de tener medidas de respuesta antes del punto más álgido de una epidemia", dijo la coautora Stefanella Boatto, quien concluyó que la investigación "muestra la importancia de los barrios centrales en la transmisión del dengue".