Los expertos afirman que cumplir con el calendario de vacunación es la medida más efectiva para prevenir la enfermedad.
La Asamblea Mundial de la Salud, máxima autoridad en el ámbito de la salud, aprobó la primera resolución en la historia para trabajar a escala global en la eliminación de la meningitis e instó a los países miembros a identificar esta enfermedad como una prioridad y a aumentar los esfuerzos para terminar con la amenaza sanitaria que supone.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la meningitis meningocócica es una infección bacteriana grave de la membrana que rodea el cerebro y la médula espinal, y tiene un alto impacto: se calcula que puede ser mortal hasta para la mitad de las personas que la padecen, por lo que cada año cobra la vida de 300 mil personas. Además, deja a uno de cada cinco afectados con secuelas devastadoras a largo plazo, como daño cerebral, sordera o trastornos de aprendizaje.
Entre las acciones que contempla la adopción de esta resolución se encuentran:
Aumentar las coberturas de inmunizaciones.
Elaborar y aplicar medidas multidisciplinarias, que incluyan el acceso equitativo a vacunas seguras, eficaces, de calidad y asequibles.
Realizar un trabajo articulado entre todos los agentes de la salud como ministerios, sector privado, organizaciones de la sociedad civil, entre otros, con el fin de que aporten en la consecución de los objetivos planteados al 2030.
Frente a ello, el Dr. Julio Tresierra, pediatra neonatólogo y gerente médico de Sanofi Pasteur, resalta la importancia de la medida. “Es un paso fundamental en los esfuerzos globales por visibilizar la gravedad de esta enfermedad y por reducir el número de muertes que provoca cada año”, indica.
Así mismo, explica que la evidencia científica ha demostrado que la vacunación es la estrategia más eficaz para el control y eliminación de esta y otras enfermedades infectocontagiosas. Por tanto, insiste en la importancia de reforzar los programas de inmunización para proteger a la población. “Hoy, gracias al avance de la ciencia, existen vacunas seguras y eficaces, que reducen significativamente la tasa de infecciones”, indica Tresierra.
Meningitis y COVID-19
Recientemente, la revista médica BMJ reportó un caso de coinfección de meningitis meningocócica y COVID-19 en el Reino Unido. La coinfección es aquella causada por dos o más agentes patógenos, como virus o bacterias.
Se trata de una joven de 22 años, con buen estado físico y sin antecedentes médicos que durante tres semanas presentó síntomas de fiebre, dolor de cabeza, rigidez de cuello, escalofríos y confusión. De acuerdo con la investigación de los especialistas, la joven no habría recibido la vacuna contra la meningitis. Sin embargo, debido a la pronta respuesta por parte del equipo médico, la joven se recuperó exitosamente.4
Ante este escenario, el Dr. Julio Tresierra hace énfasis en que, aunque se conozcan pocos casos en el mundo, esta enfermedad sigue activa y cuando aparece tiene consecuencias muy serias para la salud de las personas.