Alrededor de 270 millones de personas se encuentran al borde de la inanición debido al desabastecimiento de alimentos, señaló el director del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, David Beasley.
DAVOS. Las vulnerabilidades en el sistema mundial de suministro de alimentos fueron expuestas por la pandemia, lo que llevó a que los líderes tuvieran más conciencia de que la falta de soluciones podría significar hambruna y migración masiva, dijo el miércoles el director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas.
La crisis ha interrumpido las cadenas de suministro en todo el mundo, llevando a 270 millones de personas al borde de la inanición, dijo David Beasley, director ejecutivo del PMA, en una reunión virtual del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés).
"Si no recibimos el apoyo y los fondos que necesitamos, habrá hambruna masiva, desestabilización de naciones y habrá migración masiva y el costo de eso es mil veces mayor", advirtió Beasley, agregando que habría más eventos parecidos a la Covid-19.
El primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, declaró en el foro que los argumentos a favor del cambio eran convincentes.
"No estamos haciendo lo suficiente en este tema, pero les prometo que haremos más", aseguró. Señaló además que habría una gran oportunidad para crear puestos de trabajo a medida que se aborden las amenazas planteadas por la Covid-19, el cambio climático y el colapso de la biodiversidad.
Beasley dijo que cuando llegó al PMA hace cuatro años, había 80 millones de personas al borde de la inanición, pero que incluso antes de la pandemia, la cifra se disparó a 135 millones debido a desafíos como las guerras y el cambio climático.
Los líderes mundiales ahora están comenzando a abordar los problemas del sistema alimentario, pero hay mucho más por hacer, agregó Beasley.
"Teníamos literalmente a cientos de millones de personas al borde de la inanición y los medios de comunicación no lo cubrían, pero ahora la gente está empezando a despertar y dar un paso adelante".