Los departamentos de gestión del talento actualmente tienen herramientas que les permiten mejorar sus procesos.

Atrás quedaron los días en que los procesos de selección de las empresas estaban basados únicamente en entrevistas personales. Si bien estas metodologías siguen en uso, desde hace varios años los departamentos de gestión del talento han incorporado nuevas herramientas, como los test de perfil conductual, que han ganado terreno por su rapidez, precisión y confiabilidad.

“Estos instrumentos permiten comprender el ‘cómo’ además del ‘qué’ hace una persona. Es decir, que facilitan saber cómo se relaciona con la gente, cómo actúa al momento de tomar decisiones, cómo vende, cómo lidera, entre muchos otros comportamientos claves”, dice Soledad Gallastegui, psicóloga, magister en RR.HH. y consultora de PDA International.

En el caso de crear estrategias para desarrollar a los colaboradores, esta información posibilita la detección, por ejemplo, de necesidades de formación y áreas de oportunidad de desarrollo, lo que resulta imprescindible para poder brindar feedback efectivo y constructivo a los trabajadores, de manera de facilitar el autodesarrollo y el accountability que todas las organizaciones ambicionan.

La especialista agrega que si bien algunas personas desconfían de los resultados de los test psicométricos, por el fantasma de la manipulación y el engaño, todas las herramientas en psicología son susceptibles a las resistencias y a la deseabilidad social, o en otras palabras, a la tendencia a responder consciente o inconscientemente según lo esperado.

Justamente allí es donde se destacan herramientas como el PDA Assessment, que incluye un indicador de consistencia que permite detectar aquellos casos en que la información brindada pudiera ser insuficiente o no del todo concluyente.

El uso de los test psicométricos han aumentado debido a los resultados favorables que han tenido en las organizaciones por su productividad, minimización de la rotación, fortalecimiento del compromiso y bienestar del colaborador, lo que se refleja en el clima laboral positivo, sentido de pertenencia y compromiso con los objetivos empresariales.