De acuerdo a un estudio clínico, el amplio uso de los glucocorticoides en la actualidad ha provocado que la OIG sea la causa más frecuente de osteoporosis inducida por fármacos.
La osteoporosis es una enfermedad esquelética sistémica caracterizada por disminución de la densidad mineral ósea con alteraciones de la microarquitectura del hueso y aumento del riesgo de fractura.
Se clasifica como primaria cuando depende de procesos fisiológicos, como la menopausia y envejecimiento normal y, secundaria cuando está condicionada por otras patologías o medicamentos, como el caso de la osteoporosis inducida por glucocorticoides (OIG).
De acuerdo a un estudio clínico realizado por la Universidad de Especialidades Espíritu Santo, el hospital Cosme Argerich de Buenos Aires, el hospital Luis Vernaza de Guayaquil y el Centro de Reumatología y Rehabilitación (Cerer), el amplio uso de los glucocorticoides en la actualidad ha provocado que la OIG sea la causa más frecuente de osteoporosis inducida por fármacos.
Según los autores del estudio, el 0,5 % de la población y el 1,7 % de las mujeres mayores de 55 años reciben glucocorticoides orales. En pacientes con enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide (AR), lupus, espondilitis anquilosante (EA), la polimialgia reumática, y las vasculitis, entre otras, la osteoporosis es una comorbilidad asociada. Esto puede ser debido al uso de glucocorticoides por largos periodos de tiempo. Estos pacientes son más propensos a sufrir fracturas por fragilidad.
Los glucocorticoides tienen un efecto directo sobre el metabolismo al bloquear las acciones de la vitamina D y la absorción de calcio, lo que conlleva a una disminución del calcio sérico. Los glucocorticoides son fármacos antiinflamatorios, antialérgicos e inmunosupresores derivados del cortisol.