En medio de un sistema tan estructurado, la experta en aprendizaje combinado y fundadora del programa Media Arts en Palo Alto High School, propone dejar que los niños se aburran, una de las mejores cosas que les puede pasar para que desarrollen su creatividad.
Con padres helicópteros, que por miedo a que sus hijos se equivoquen o tengan que lidiar con el fracaso se encargan de hacerles sus trabajos escolares u otras tareas, los infantes se vuelven cada vez más dependientes, y así difícilmente se les puede criar para el éxito, dice Esther Wojcicki, periodista, académica y autora del libro How to Raise Successful People, quien se presentó en enlightED 2019, promovido por Fundación Telefónica, IE University, South Summit y Fundación Santillana, en la que desplegó su experiencia en el panel titulado “Cómo criar personas exitosas”.
Para ella, la actitud de estos padres tiene un efecto negativo en los niños y adolescentes, porque termina formando personas con temor al riesgo y, en consecuencia, disminuyendo su capacidad creativa. Al mismo tiempo, los infantes se confunden, lo que también se replica en la educación, espacios que, de acuerdo con algunos especialista, van en contra de la creatividad. Uno de ellos es el educador y escritor Ken Robinson, quien estima que si bien la creatividad no está relacionada directamente con equivocarse suele estar relacionada. Muchas veces, por ejemplo, son los padres y la escuela los que penalizan el error, y para crear e innovar es necesario improvisar y arriesgarse.
Para Wojcicki, “un gran profesor es al que le gusta enseñar y tiene en consideración lo que necesita cada niño para entender, tomando en cuenta las diferencias. Debería estar dispuesto a explicarle 10 veces a un niño que le cuesta entender. En cambio, en las escuelas de hoy se suele explicar solo una vez y si el estudiante no entiende se da por hecho que algo va mal con él, cuando esto no es así".
El método TRICK
No hay que olvidar que esta escritora y educadora tiene fama de saber enseñar y orientar para el éxito, no solo en la escuela sino que también en su propia casa. No por nada publicó este año el libro con el que respondió las dudas que recaían sobre ella al saber que sus tres hijas lideraban y hacían lo que siempre habían querido: Susan es directora general de YouTube, Anne es cofundadora y CEO de 23andMe y Janet es profesora de Pediatría en la U. de California en San Francisco. Y no solo esto, ya que también es reconocida por cambiar el foco del periódico de Palo Alto High School, transformándolo en un programa de más de 700 estudiantes que afirman valorar la libertad que tienen y poder aumentar la confianza en sí mismos.
En el libro donde Wojcicki relata cómo la hecho, refiere al método TRICK, acrónimo que significa confianza, respeto, independencia, colaboración y amabilidad, como una forma de lograr que tanto niños como adultos puedan crecer empoderados y desarrollar ciertas habilidades que les permitan tener éxito. Según la autora, todas estas claves tienen relación y es tan sencillo como que “no puedes tener confianza si no tienes respeto y, a su vez, es imposible colaborar sin respeto, independencia y confianza. Finalmente, se debe ser amable con los demás”.
La verdad es que el secreto para tal éxito no parece ser más que simple lógica, y en esto los padres o tutores son fundamentales. Desde dar rienda suelta a los gustos personales de los hijos a ayudarles a tomar consciencia de sus actos y equivocaciones, estas son algunas de las pautas que pueden llevarse a cabo según la autora. Pero lo más importante, y el gran secreto al parecer, es dejar que los hijos se aburran y fallen.
Porque el éxito no solo debe estar centrado en ganar grandes cantidades de dinero o tener un cargo rimbombante, sino que poder ser feliz o, al menos, estar satisfecho con lo que se hace. Culturalmente, el éxito se trata como algo inalcanzable y ligado generalmente al bienestar material, pero en ocasiones el perseguir este tipo de meta ha llevado a que la gente no vea realmente que el éxito puede estar en cosas pequeñas y más cerca de lo que cree.
Olvídese de la tablet o el smartphone
Son tentadores, pero para Wojcicki los aparatos móviles deben evitarse en los niños menores de cinco años y limitarse en la adolescencia. El asunto, explica, es que “antes de los cinco años es cuando más se desarrolla la creatividad, pero ahora cuando un niño está aburrido los padres suelen darle algo electrónico y esto corta la creatividad. Desde los seis años se puede introducir la tecnología algunas horas al día. La tabletas no son niñeras”.
Pero no solo hay debate sobre si dejar o no que los niños se introduzcan a temprana edad en la tecnología cuando están en sus casas, sino que si es conveniente que los aparatos electrónicos ingresen a la escuela. Mientras algunos especialistas instan a no temer a la tecnología, sino que saber aprovecharla; para la escritora estadounidense es clave esto último, porque aunque aconseja limitar su uso, el principal consejo es usar esto a favor del aprendizaje. Con más de 700 alumnos en su clase, Wojcicki enseña a usar la tecnología para investigar y leer, por ejemplo, lo crucial es que los estudiantes aprendan a pensar.