A partir de enero de 2016 serán entregados por el FNR; pacientes de mutualistas viajaban al exterior para conseguirlos.
El Observador. Hace seis años que Leonardo Ferreyra es argentino. Pero no sacó la residencia para vivir en ese país, sino para poder sobrellevar el VIH que le diagnosticaron en 1993. Su organismo es resistente a los medicamentos que cubren las mutualistas en Uruguay, por lo que debe viajar una vez al mes a Buenos Aires para que en un hospital público puedan brindarle los fármacos que necesita.
Su caso no es el único. Solo en la Red Uruguaya de Personas Positivas (Redupp) –una asociación civil de personas con VIH que Ferreyra preside– hay siete integrantes más que debieron pagar US$ 1.500 para poder llegar a tener la medicación todos los meses. Desde hace 20 años, existe el Fondo Nacional de Lucha contra el Sida para financiar los medicamentos como los que requiere Ferreyra, pero ese fondo solo funcionaba para la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE). Sin embargo, a partir del 1 del enero de 2016 la situación de las personas que tienen el mismo problema que Ferreyra cambiará. El Fondo de Lucha contra el Sida se ampliará a todo el Sistema Nacional Integrado de Salud, lo que significa que las mutualistas podrán otorgar medicamentos para el VIH a los que antes no tenían acceso. El Fondo Nacional de Recursos (FNR) será el encargado de proveerlos, ya que son medicamentos costosos.
La gerenta del FNR, Alicia Ferreira, explicó a El Observador que para reducir costos, se está negociando con todo el Mercosur. De hecho, a través de un acuerdo con la industria farmacéutica, uno de los tres fármacos que se requieren bajó 80% su costo. "En esta ley de Presupuesto se permitió que ese fondo se use también en pacientes, a través del FNR, que compre la medicación que es de alto costo y que se pueda dar a todos los pacientes independientemente de cuál fue la cobertura", dijo.