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Personas que fueron víctimas de infidelidad tendrían más posibilidades de volver a ser engañadas por su nueva pareja
Jueves, Septiembre 4, 2014 - 15:45

Estudio revela que lo mismo pasa con las víctimas de abuso verbal y físico.

“Los únicos hombres en los que puedes confiar son los infieles porque nunca cambian”, dice el dicho. ¿Y la chica a la que engañaron? ¿Qué pasa con ella? De acuerdo a un estudio… nada bueno.

Kayla Knopp, sicóloga por la Universidad de Colorado, condujo un nuevo estudio que involucró a 484 parejas (que no estaban casadas) entre los 18 y los 34 años. Knopp descubrió que las personas que fueron víctimas de infidelidad tienen más posibilidades de volver a ser engañadas por su nueva pareja. Lo mismo pasa con las víctimas de abuso verbal y físico, que son cinco veces más propensas a entrar a toda relación abusiva en su vida.

Este tipo de estudios son totalmente desalentadores, porque será mucho más fácil culpar a las víctimas. “Estas personas buscan a esas parejas horribles así que no hay que ayudarlas, ni sentirnos mal por ellas”. Este tipo de pensamiento es terrible porque no comprende para nada a la víctimas, ni la situación en la que están.

De acuerdo a PsychCentral, las víctimas de violencia doméstica tienen una pésima autoestima, imagen personal, creen que los celos son una prueba de amor y no saben lo que quieren. Por tanto, la persona que una vez fue víctima de abuso físico y verbal será mucho más susceptible a una persona que busca lastimar a alguien más.

Y las víctimas no son las únicas que repiten el círculo. Las personas que cometen abuso físico y emocional son tres veces más propensos a repetirlo con otra persona. ¿Y los infieles? Tienen 3,5 más probabilidades de repetir la infidelidad en una relación futura.

¿Pero qué pasa con las víctimas de infidelidad? ¿Por qué se quedan en ese círculo vicioso? Si lo pensamos, una vez que te engañan tu autoestima y confianza se puede ver seriamente dañada. Estas personas podrían creer que hay algo mal con ellas, que no son suficientes y eso las sentencia a una vida de sospecha, duda y miedo.

Las infidelidades suceden, pero si te pasó no significa que es el fin del mundo. Todas las personas merecen un amor sano y es importante que recuerden que pueden superarlo y romper con el patrón que podría estar marcando su vida.

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Excélsior