En el país el problema aún no es considerado un problema de salud nacional, a pesar de que las cifras van al alza.

 Las cifras de infertilidad siguen incrementándose de forma alarmante en Perú. Los últimos reportes indican que 15 de cada 100 parejas tienen dificultades para ser padres. Pese a esto la infertilidad aún no es considerada como un problema de salud pública en el país, manifestaron especialistas.

De acuerdo a Katterine Chávez, ginecóloga de Solidaridad Salud de Chorrillos, la infertilidad es definida como la incapacidad de lograr un embarazo después de 12 meses o más de relaciones sexuales no protegidas.

“Los casos de infertilidad se atribuyen 40% a factores masculinos, 40% a factores femeninos y un 20% a alteraciones en ambos. Por tanto, el tratamiento de una pareja infértil siempre parte en la evaluación de causas tanto del hombre como de la mujer”, precisó. 

Entre las causas masculinas, detalló la especialista, están los trastornos hormonales, vasculares e infecciosos que son registrados en un perfil espermático (espermatograma). 

Por el lado de las causas femeninas más frecuentes se hallan la obstrucción tubárica y la disminución de la “reserva ovárica”, es decir la capacidad de producir óvulos, debido a que muchas mujeres postergan su maternidad por trabajo, desarrollo profesional o para alcanzar un mayor poder adquisitivo.

“No es raro ver en el consultorio parejas mayores de 40 años intentando saber por qué no han logrado concebir, lo que trae consigo situaciones que podrían generar crisis emocional en ambos”, señaló.

Técnicas y recomendaciones

De acuerdo con Chávez, para preservar la fertilidad se recomienda llevar una vida saludable, evitar el alcohol y el tabaco, así como el consumo de drogas. Tener además una dieta rica en proteínas y practicar deportes.

Sin embargo, hoy en día existen técnicas innovadoras que permiten conservar la capacidad reproductiva. Entre ellas está la criopreservación o congelación de óvulos y espermatozoides, técnica mediante la cual se reservan los gametos hasta cuando la pareja desee convertirse en padres.

Si una pareja desea concebir, pero no ha tenido la oportunidad de preservar sus gametos, puede recurrir también a técnicas de bajo costo como el coito dirigido o la inseminación artificial, que se realiza con éxito en parejas seleccionadas.

Si esto no fue suficiente, la pareja puede recurrir a la asistencia de alta complejidad con herramientas novedosas como la Fertilización In Vitro, donde los óvulos inducidos y aspirados se colocan en contacto directo con los espermatozoides y su posterior implantación en el útero materno luego de 3 a 5 días de incubación. 

También se cuenta con la Inyección Intracitoplasmática de Espermatozoide (ICSI), donde a un solo óvulo se inyecta directamente un solo espermatozoide, en casos donde hay pocos o casi nada de espermatozoides.