Las exportaciones peruanas de uva del último trimestre del 2020 superaron las expectativas —ante los problemas del resto de productores globales—, pasando la barrera de los US$ 1.000 millones.

El 2020 fue un año particular. Debido a la pandemia del COVID-19, casi todas las exportaciones de los productos agrícolas fueron afectadas. Algunas de manera negativa, por los cierres de frontera, la cuarentena y la reducción de personal, mientras que otra de manera positiva, por los cambios en las tendencias de consumo hacia alimentos más saludables.

En el caso de la uva, se observó una dinámica positiva, explicó en un reciente informe del sector PromPerú. 

"Durante los primeros meses del año, el pánico producido por una enfermedad hasta ese momento desconocida y los consecuentes anuncios de una posible escasez, generaron un incremento de la demanda global de alimentos y un incremento en los precios de muchos productos que no podían ser rápidamente provistos", indica la entidad en el reporte mensual. 

Por aquel entonces la campaña de uva peruana 2019/2020 ya estaba por concluir, pues va de octubre a febrero. Sin capacidad de incrementar el volumen exportado, lo que consiguieron los proveedores peruanos fue mejorar sus precios. Durante este periodo, Las exportaciones peruanas de uva del último trimestre del 2020 superaron las expectativas —ante los problemas del resto de productores globales—, pasando la barrera de los US$ 1.000 millones, y es posible que alcance el liderazgo mundial.

Es así que el precio de la uva peruana alcanzó los US$ 2.45 por kilogramo, 14% más con respecto al 2019, donde el volumen creció en el 6% previsto, pero el valor exportado se elevó en 21% durante el primer bimestre.

Entre marzo y julio, los envíos peruanos de uva sumaron 11,602 toneladas por US$17.7 millones, debido a que al no estar en campaña se realizaron despachos de fruta congelada y procesada. 

La situación del producto fresco cambió drásticamente en este periodo. Ante el cierre de fronteras y las restricciones impuestas por los gobiernos, se generaron problemas en los puertos que afectaron los envíos de países en campaña, como Chile, que redujo sus exportaciones en 7% durante ese tiempo. 

Además, ante la crisis económica, la demanda de alimentos se concentró en cítricos y otros asociados a mejorar las defensas del organismo en desmedro del resto, como la uva.

Desde agosto, los países alrededor del mundo iniciaron con sus planes de reactivación económica y la demanda de alimentos retornó a la normalidad. Este nuevo contexto favoreció a la uva y a los países que seguían o iniciaron campaña, como China, que incrementó sus envíos en 10% en valor entre agosto y diciembre, mientras
que el Perú aumentó sus exportaciones en 20% e Italia, en 26% en ese mismo periodo.

En el caso particular de Estados Unidos, cuya campaña debió beneficiarse con la reactivación, se observó una reducción de 4%, ocasionada por una caída en su producción, principalmente en California.

Ante la vorágine de resultados de cada país, el Top 5 de principales proveedores de uva en el 2020 sufrió una alteración con respecto al del 2019. 

Hasta el 2019, China era el principal exportador, con US$ 987 millones despachados al exterior ese año, seguido por Chile (US$ 950 millones), Estados Unidos (US$ 856 millones), el Perú (US$ 872 millones) e Italia (US$ 720 millones). 

De acuerdo con estimaciones de FreshFruit, debido a sus problemas de producción, para el 2020, Estados Unidos caería al quinto lugar con US$ 805 millones en envíos, mientras que Italia, subiría al cuarto lugar con US$ 900 millones. 

Chile, que fue el más afectado por la pandemia, retrocedería al tercer lugar con US$ 931 millones, y el Perú y China Continental (sin incluir Hong Kong), registrarían un empate en el primer lugar.

Ambos países superaron los US$ 1.000 millones en envíos. Los estimados preliminares arrojan US$ 1,046 millones para China y US$ 1,049 para el Perú, pero el efecto de la última semana de paralización de exportaciones en el Perú por los bloqueos podría alterar ese resultado. 

El valor del Perú ya contempla gran parte del efecto, pero el de China podría haberse incrementado ligeramente si en esos días sustituyó al Perú. Las cifras finales de China no estarán disponibles hasta marzo.