Dado que cada persona reacciona a la hipoglucemia de modo diferente, la única forma de diagnosticarla es mediante la medición de los niveles de glucosa en sangre.
Los episodios de hipoglucemia pueden ocurrir con una frecuencia durante la noche en los pacientes diabéticos. Para prevenirlos, es fundamental llevar una dieta equilibrada, hacer actividad física y llevar un tratamiento farmacológico óptimo para la diabetes; incluso en algunas situaciones es de utilidad comer alguna papilla entre la cena y la hora de ir a dormir.
Dado que los episodios de hipoglucemia pueden producirse después de hacer ejercicio, se recomienda que las personas con diabetes sean cautas si realizan actividad física al anochecer.
Conocer las causas y los síntomas de la hipoglucemia, así como las estrategias que permitan reducir el riesgo de padecerla, es el punto de partida para su prevención.
Síntomas
La hipoglucemia se produce cuando los niveles de glucosa en sangre bajan demasiado, usualmente por debajo de los 70 mg/dl.
Algunos de sus síntomas más frecuentes son: temblores, mareos, nerviosismo, sudoración, hambre, dolor de cabeza, cambios de humor, confusión, falta de coordinación, y desmayo.
Durante la noche, la hipoglucemia puede manifestarse con síntomas como: pesadillas, despertar con la ropa de cama excesivamente transpirada o con sensación de cansancio, irritabilidad o confusión.
Dado que cada persona reacciona a la hipoglucemia de modo diferente, la única forma de diagnosticarla es mediante la medición de los niveles de glucosa en sangre.
En las personas con diabetes, una ingesta alimentaria inadecuada, un exceso de actividad física o altas dosis de medicamentos para la diabetes puede ocasionar una reducción anormal de los niveles de azúcar en sangre llamada hipoglucemia.
La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por altos niveles de azúcar (glucosa) en la sangre, que resulta de una falta o una insuficiente producción de insulina en el organismo o de que la insulina disponible no actúa en forma adecuada.