La actividad económica probablemente se vio afectada por las estrictas restricciones al movimiento y las empresas impuestas por el gobierno durante la mayor parte del segundo trimestre en un intento por contener la propagación del virus, según HSBC.

Se espera que la economía de Malasia se contraiga por primera vez en más de una década en el segundo trimestre, ya que la pandemia del coronavirus y las estrictas medidas de contención arrastraron el gasto privado y las exportaciones.

El producto interno bruto (PIB) probablemente cayó un 10% en abril-junio frente al mismo período del año anterior, según el pronóstico mediano de una encuesta de 11 economistas. Eso marcaría la primera contracción desde el tercer trimestre de 2009, durante la crisis financiera mundial.

Las previsiones individuales oscilaron entre -5,6% y -13,6%.

Bank Negara Malaysia (BNM), el banco central, tiene previsto publicar los datos el viernes.

La actividad económica probablemente se vio afectada por las estrictas restricciones al movimiento y las empresas impuestas por el gobierno durante la mayor parte del segundo trimestre en un intento por contener la propagación del virus, según HSBC.

“Tanto el consumo privado como la inversión fija se contrajeron durante el trimestre, como lo señalan indicadores de alta frecuencia como ventas de vehículos de motor, ventas minoristas, sentimiento del consumidor y producción industrial”, dijo el banco en una nota de investigación.

Las exportaciones crecieron un 8,8% en junio, la primera expansión en cuatro meses, ya que más países flexibilizaron las medidas contra el coronavirus y la demanda mundial se recuperó lentamente. Sin embargo, los envíos se habían desplomado un 25,5% el mes anterior, el peor desempeño de Malasia en más de una década.

Salvo una segunda ola de casos de virus, los analistas dicen que lo peor puede haber pasado para la economía, pero un resurgimiento de infecciones a nivel mundial y la ausencia prolongada de dólares del turismo podrían ralentizar el ritmo de la recuperación.

BNM había dicho en abril que la economía podría contraerse hasta en un 2% o crecer marginalmente en un 0,5% este año.

Ha recortado su tasa de interés clave cuatro veces en lo que va de año, llevándola a un mínimo histórico de 1,75%.