El magnate y su esposa Melinda esperan encontrar un método seguro, fácil de tomar, rápido y reversible.

A través de su fundación, Bill y Melinda Gates destinarán US$ 620 mil a investigaciones para crear una píldora anticonceptiva para hombres. El objetivo de la iniciativa es reducir la pobreza y sobrepoblación en el mundo.

Actualmente existen varios métodos anticonceptivos para mujeres como las píldoras, parches, DIU y otros. En el caso de los hombres sólo existen los condones y la vasectomía.

De acuerdo con Martin Matzuk, director del Centro para el Descubrimiento de Fármacos de la Facultad de Medicina Baylor, está en busca de la sustancia química que deje temporalmente estériles a los hombres.

La píldora que se quiere desarrollar sería un método seguro, fácil de tomar, rápido y reversible. Y es que, desde hace varios años la industria farmacéutica abandonó la idea de crear un anticonceptivo capaz de interceptar a millones de espermatozoides antes de que alcancen el óvulo de una mujer.

Los investigadores piensan que el gran aumento de la población es la causa de la escasez de alimentos y las severas afectaciones al medio ambiente. “Simplemente no podemos sostener a la población al ritmo que crece”, comenta Matzuk.

El anticonceptivo reduciría los embarazos no deseados, los cuales representan el 40% del total en el mundo.

"La carga química de los anticonceptivos recae únicamente en las mujeres. Es un equilibrio injusto dentro de la ecuación”, indica Charles Easley, profesor adjunto de la Universidad de Georgia. A través de las píldoras, las mujeres se encuentran expuestas a una mayor carga hormonal y química.

Además, anticonceptivos para mujeres provocan aumento de peso, cambios de ánimo y otros trastornos.

Las investigaciones para crear una píldora para hombres se detuvieron hace años, porque durante las pruebas uno de los participantes en el estudio se suicidó y otros dijeron sentir depresión.

El objetivo de la Fundación Bill y Melinda Gates buscan garantizar que para el 2020, unos 120 millones de mujeres y niñas de los países más pobres tengan acceso a información, servicios y suministros anticonceptivos de calidad.