Pasar al contenido principal

ES / EN

Píldora brasileña contra el cáncer tendría baja eficacia
Martes, Marzo 22, 2016 - 15:50

El medicamento desarrollado por un investigador de la Universidad de Sao Paulo (USP) fue sometido a pruebas gubernamentales, las que descubrieron que los escasos efectos positivos los provocaría la monoetanolamina .

Xinhua. El gobierno brasileño aseguró que la polémica píldora contra el cáncer que la justicia autorizó a tomar a algunos pacientes tiene una baja eficacia, según revelaron estudios médicos.

En un comunicado, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación aseguró que las pruebas realizadas con conejillos sobre el producto muestran que no es tan eficiente en la lucha contra el cáncer como se había informado.

La polémica píldora, llamada fosfoetanolamina sintética, fue desarrollada por un investigador de la Universidad de Sao Paulo (USP) y ganó gran repercusión, hasta el punto que varios pacientes acudieron a la Justicia para que les autorizara a consumirla.

Tras ello, el gobierno anunció que invertiría 10 millones de reales (unos US$2,7 millones) en una serie de exámenes en laboratorio y con conejillos para probar la eficacia y la seguridad de la medicina, y pidió a todos los pacientes que se abstuvieran de tomarla hasta que no se demostrara su eficacia.

Los resultados de las pruebas mostraron que la píldora tiene muy poco efecto sobre tumores cancerígenos en comparación con medicinas usadas para tratar el cáncer hace décadas. Uno de los exámenes preliminares mostró que la sustancia apenas tiene un 32,2% de fosfoetanolamina, que es el principio químico supuestamente activo contra el cáncer.

Otros dos experimentos indicaron que la píldora tuvo una actividad casi mínima frente a cinco tipos diferentes de cultivos de células cancerígenas en laboratorio, y que los efectos positivos no fueron provocados por la fostoetanolamina, sino por la monoetanolamina, otra molécula presente en el compuesto.

La fosfoetanolamina fue distribuida gratuitamente durante más de una década por la USP, hasta que las autoridades sanitarias la prohibieron por la falta de estudios clínicos acerca de su eficacia.