La producción también se expandió a un ritmo más lento en comparación con abril.
La actividad manufacturera japonesa se expandió en mayo a su ritmo más lento en siete meses luego de que se enfriaron los nuevos pedidos, mostró una encuesta revisada este viernes, lo que sugiere un debilitamiento en la demanda interna.
La lectura final del Índice de Gerentes de Compras (PMI, por su sigla en inglés) Markit/Nikkei del sector manufacturero japonés fue de 52,8 estacionalmente ajustado, más alto que la lectura inicial de 52,5 pero aún por debajo del nivel de 53,8 en abril.
El índice fue el más bajo en siete meses, aunque se ha mantenido por encima del umbral de 50 que separa la expansión de la contracción por vigésimo primer mes consecutivo.
"Los nuevos pedidos totales crecieron en una medida más débil, mientras que el índice de exportaciones aumentó por primera vez desde enero", dijo Joe Hayes, economista de IHS Markit, que compila la encuesta.
"Una mejora más fuerte en la demanda extranjera de productos japoneses será bienvenida; sin embargo, el ritmo de expansión en mayo permanece marcadamente por debajo de los observados a comienzos del año antes de la apreciación del yen", agregó.
El índice final para los nuevos pedidos fue de 53,0, frente a una lectura preliminar de 52,3 y por debajo del nivel de 53,8 del mes anterior, en una señal de que el consumo interno en la tercera economía más grande del mundo se debilitó ligeramente.
La producción también se expandió a un ritmo más lento en comparación con abril.
Sin embargo, el panorama de las exportaciones fue ligeramente más positivo, ya que el índice final de nuevos pedidos de exportación fue de 51,1, por encima de la lectura inicial de 51,0 y del nivel de 50,4 en mayo, lo que sugiere una mejoría en la demanda global.