Las localidades con mayores problemas son Pozo Almonte, Alto Hospicio y Huara (en la región de Tarapacá) y Arica, Putre y Camarones (en la región de Arica y Parinacota).
Santiago. Más de 9.500 viviendas resultaron dañadas en el norte de Chile por el terremoto de 8,2 grados de magnitud que golpeó la zona el martes 1 de abril y toda la actividad sísmica que aún se registra.
"Las dos primeras regiones del país concentran la mayoría de las construcciones siniestradas", informó este fin de semana el ministerio de Vivienda, tras realizar un catastro preliminar del impacto del sismo, que provocó la muerte de seis personas.
De la cantidad de hogares citada, 1.246 viviendas han sido declaradas -hasta ahora- con daños graves y, por lo mismo, irreparables en las regiones Arica y Parinacota y Tarapacá, tras el terremoto y una réplica de 7,8 grados el miércoles.
Varios ministros del gobierno de Bachelet, encabezados por el titular del Interior, Rodrigo Peñailillo, se encuentran en la zona norte evaluando los daños y tratando de agilizar la ayuda a los damnificados, así como la reposición de los servicios básicos.
Las localidades con mayores problemas son Pozo Almonte, Alto Hospicio y Huara, en la región de Tarapacá. También se detectaron daños graves en Arica, Putre y Camarones, en la I Región del país.
"Vamos a disponer la posibilidad de un subsidio de arriendo, que les permita habitar transitoriamente en una vivienda próxima a sus hogares", dijo la ministra de Vivienda, Paulina Saball, refiriéndose a quienes sufrieron la destrucción de sus casas.
Saball precisó que la reconstrucción demandará la creación y fortalecimiento de pequeñas empresas y de constructores que "estén dispuestos a participar en esta reparación".
Agregó que aunque no hay plazos definidos para la tarea, espera que se desarrolle entre seis meses y un año.
Por su parte, el ministro Peñailillo dijo que "se requiere de un esfuerzo mayor del Estado" para llevar adelante la reconstrucción y reiteró que "los recursos necesarios van a estar disponibles".
También afirmó que el Ejército seguirá colaborando en el resguardo de las zonas golpeadas por el sismo para garantizar la seguridad y evitar robos o saqueos.
Aunque se han redoblado los esfuerzos porque el norte chileno recupere en parte la normalidad, las réplicas del terremoto persisten y ya se han registrado más de 500.
Eso sí, la intensidad de los movimientos telúricos ha bajado y el más fuerte que se sintió a las 02.44 hora local del sábado (05.44 GMT) siendo de 5,4 grados.