La intención era "tratar de provocarnos, de dañar la visita del presidente. Así que no voy a caer en esa trampa", señaló el presidente de Ecuador.
Quito. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, juzgó hoy como "una clara intromisión en asuntos ecuatorianos" la carta que le enviaron esta semana ocho senadores estadounidenses en la que expresan su preocupación por temas locales y multilaterales.
En la misiva, enviada el pasado miércoles, los senadores le sugirieron que "fortalezca el respeto de su gobierno a los principios democráticos" y a la oposición, y expresaron su preocupación por el intento de Correa de "debilitar" a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), con sede en Washington.
Además, cuestionaron la condena a prisión de tres opositores al gobierno, entre ellos, Cléver Jiménez, quien acaba de perder su condición de legislador, por injurias al gobernante; y pidieron que se reconstruyan las relaciones bilaterales.
El mandatario ecuatoriano, quien se encuentra de visita en Estados Unidos, afirmó en un conversatorio con medios de comunicación en Nueva York y retransmitido a Ecuador, que la carta es una "clara provocación" en la visita que realiza en ese país.
La intención era "tratar de provocarnos, de dañar la visita del presidente. Así que no voy a caer en esa trampa", señaló el gobernante tras indicar que legisladores del oficialista movimiento Alianza PAIS (AP) en la Asamblea Nacional (Congreso) de Ecuador ya respondieron a la misiva.
"Me parece que nuestra Asamblea ya le contestó a esos señores y para mí eso es suficiente, demasiado incluso. Yo no les hubiera contestado", apuntó.
"Usted se imagina la falta de respeto que sería que nuestros asambleístas manden una carta al presidente (Barack) Obama diciéndole que mejore la democracia en Estados Unidos", planteó Correa.
Asimismo, cuestionó la política de Estados Unidos en materia de derechos humanos.
"No quiero profundizar en esto por respeto al país donde nos encontramos, pero nos hablan de derechos humanos y la pena de muerte contraviene todas las normativas de los derechos humanos", dijo Correa al aludir los casos de Guantánamo y el espionaje denunciado por Edward Snowden, ex contratista de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos.
"Entonces sí molesta esa intromisión, esa doble moral. Deberían, lo que están pidiendo a Ecuador, tal vez buscarlo al interior de su propio país", ironizó.
La carta fue rubricada por el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, el demócrata Robert Menéndez, a quien Correa dijo no conocer, ni tener "las más mínimas ganas de conocerlo pues sabemos de su reputación, de su postura".
A la misiva se sumaron los demócratas Richard Durbin, Timothy Kaine y Patrick Leahy; y los republicanos Marco Rubio, Mark Kirk, James Inhofe y John Cornyn, también miembros del Comité.