Titanic Belfast costó US$154 millones y es uno de los numerosos proyectos para generar turismo en Irlanda del Norte, conocida durante décadas como una región de violencia y conflictos sectarios.
Belfast. Dos bengalas lanzadas este sábado al cielo matutino de Belfast marcaron la apertura del centro Titanic, levantado en el lugar donde se botó al navío y que tiene el propósito de contar la historia del transatlántico hundido hace 100 años.
Titanic Belfast, que costó 97 millones de libras (US$154 millones), es uno de los numerosos proyectos para generar turismo en Irlanda del Norte, conocida durante décadas como una región de violencia y conflictos sectarios.
Unas 100.000 personas procedentes de 20 países reservaron entradas con antelación para visitar el edificio de la exposición construido al lado de la rampa desde la que el transatlántico fue botado por los astilleros Harland y Wolff hace un siglo.
Con la forma del casco del navío - y con la misma altura - el centro está cubierto con 3.000 paneles de aluminio y sus seis plantas contienen nueve galerías que cuentan la historia del barco a vapor y del Belfast de 1900.
"Dejamos que el edificio hablara por sí mismo, con una sencilla ceremonia, marcada por el lanzamiento de dos bengalas - como fue cuando el Titanic se echó al mar", dijo Tim Husbands, presidente ejecutivo del centro Titanic de Belfast.
También existen un paseo interactivo y filmaciones de los restos del Titanic en su lugar de descanso final a 3.784 metros de profundidad en el Atlántico, algunas de ellas nunca vistas antes.
Cerca del edificio se encuentra la oficina de Harland y Wolff donde fueron creados los planos del Titanic.
En el muelle está el restaurado transbordador del Titanic, el SS Nomadic, que transportaba a los pasajeros desde el puerto francés de Cherbourg al Titanic y a su barco hermano, el Olympic.
El Nomadic volvió a Belfast en 2006, recuperado de un desguace después de haber terminado sus días como restaurante flotante sobre el Sena de París.
La historia del Titanic ha tomado una posición central en una importante campaña turística puesta en marcha en 22 países con un costo 19 millones de libras que también contó con el poder de atracción de los campeones de golf irlandeses Rory McIlroy, Darren Clarke y Graeme McDowell.
Otros proyectos incluyen un centro interpretativo de 20 millones de libras en la Calzada del Gigante en el Condado de Antrim y la restauración de la fortificada ciudad de Londonderry.
Pero se espera que el Titanic Belfast lidere la campaña y el objetivo es que reciba 125.000 visitantes al año desde fuera de las islas Británicas.
"Se trata de una nueva era. Esta es nuestra Torre Eiffel, nuestro Guggenheim, y nuestro momento de cambiar completamente la forma en la que la gente de fuera ve a nuestra ciudad", dijo Claire Bradshaw, portavoz de Titanic Belfast.
Otros negocios de la ciudad están sacando partido del gran día vendiendo cerveza Titanic y whisky Titanic en los bares y papas fritas Titanic en las tiendas.
Incluso los locales de "fish and chips" y las cafeterías del este de Belfast han sido renombrados después de que la estación de tren que hay cerca del edificio Titanic también adquiriera el nombre del navío esta semana.