El festival de Sarajevo, iniciado hace 16 años como un acto de desafío al final del asedio de Sarajevo de 1992-1995, por las fuerzas serbio bosnias, se ha convertido en una gran vitrina para el cine del este de Europa.
Sarajevo. Eldirector rumano Florin Serban se sintió abrumado tras presentar estasemana su primera película frente a 2.000 espectadores en el festivalde cine de Sarajevo, donde había pedido financiamiento para su guiónhace tres años como un total desconocido.
"Fue un sueño ver mi película en esta pantalla", dijo el director.
Su filme "If I Want to Whistle,I Whistle", un drama sobre el desesperado intento de un adolescentepara escapar de prisión, ganó el segundo puesto del Premio del Jurado yel Premio Alfred Bauer a la innovación de cine en el festival de Berlínde este año.
La película de bajo presupuestopor un director debutante sobre un sombrío tema con actoresdesconocidos luchó por financiamiento hasta que Sarajevo Cinelinkconcedió el capital inicial para comenzar a filmar.
Cinelink entrega entre 1,5 a 3millones de euros (US$4 millones) al año, donados porinstitutos cinematográficos nacionales de países como Francia, Alemaniay Bosnia. Funcionarios del festival esperan aumentar el subsidio a 10millones de euros en los próximos años.
"Antes de grabar no habíamospodido encontrar un socio. Regresamos a Cinelink y encontramos a unco-productor", dijo Serban. "Después del rodaje, nos quedamos sindinero pero volvimos a Cinelink y ganamos un premio de post-producciónque nos dio impulso", agregó.
El festival de Sarajevo,iniciado hace 16 años como un acto de desafío al final del asedio deSarajevo de 1992-1995, por las fuerzas serbio bosnias, se ha convertidoen una gran vitrina para el cine del este de Europa.
El director del festival,Mirsad Purivatra, que comenzó Cinelink, dijo que cada año másproductores y representantes de fondos de cine europeos visitaban elmercado.
"Todos están buscando una buenahistoria, todos están buscando nuevos directores, y no hay duda queesta región es rica en talento", dijo Purivatra,
Jim Stark, un productorindependiente estadounidense que ha trabajado con escritores como JimJarmush en sus 30 años de carrera, llegó a Cinelink por segundo añopara presentar una película que está co-escribiendo y co-produciendocon un director húngaro.
"Este es el lugar quecualquiera que quiera armar una película que tenga elementos de losBalcanes o del sur de Europa debería pensar seriamente en venir", dijoStark.