La brasileña Alessandra Ambrosio se une al club de modelos que usan su fama para poner un pie en la industria de la moda.
Puede comerse un delicioso pastel mientras espera que le hagan las uñas para envidia de las decenas de miles de mujeres que miran las fotografías que un paparazzi le toma, en tal circunstancia tan de “entre casa”, pero donde ella está, como siempre, angélica. Se trata de la modelo brasileña Alessandra Ambrosio.
Conocida por ser uno de los íconos de Victoria’s Secret, título que revalidó durante el desfile de este diciembre, Ambrosio pertenece al linaje de Elle Macpherson. La caracteriza un rostro de belleza extrema y unas piernas de sirena: es decir, imposibles. Ambos atributos son un must, cuando de vender trajes de baño se trata. Por ello la modelo acaba de lanzar la colección Ále by Alessandra. Es el resultado de una alianza con la cadena de tiendas Everything But Water, que posee 93 locales en todos los Estados Unidos, y, según la modelo, la idea le surgió porque la empresa es uno de sus lugares favoritos para comprar, a pocos pasos de su residencia en Los Ángeles. Palabras de buena crianza aparte, la iniciativa continúa el esbozo de un nuevo negocio, paralelo al del modelaje, en que Ambrosio se impulsa como “diseñadora”. Ya tuvo un primer peldaño, a principios de este año, con Planet Blue, marca que se posiciona en la intersección de los mercados de fashion ligados a “bohemia” y a “vintage”.
Los caballeros, felices de que ella misma promueva sus trajes de baño.