Con goles de David Silva y Jordi Alba en la primera mitad y de Fernando Torres y Juan Mata cerca del final, España completó una categórica victoria para defender con éxito el título que había ganado en el 2008 y coronar un glorioso ciclo de cuatro años.
España volvió a consagrarse campeón europeo al golear el domingo 4-0 a Italia en la final de la Eurocopa de fútbol de Polonia y Ucrania.
Con goles de David Silva y Jordi Alba en la primera mitad y de Fernando Torres y Juan Mata cerca del final, España completó una categórica victoria para defender con éxito el título que había ganado en el 2008 y coronar un glorioso ciclo de cuatro años, que incluyó también el éxito en el Mundial 2010.
El combinado español pareció guardarse su mejor versión para la final y atacó con mucho criterio desde el comienzo, mientras que Italia se resignó tras haber quedado con 10 jugadores en la última media hora por la lesión de Thiago Motta.
España se puso en ventaja a los 14 minutos gracias a un remate del mediocampista Silva y aumentó la cuenta a cuatro minutos del descanso cuando Jordi Alba definió bien ante el arquero Gianluigi Buffon tras recibir un gran pase profundo de Xavi.
Italia tuvo intenciones de reaccionar en el segundo tiempo, pero la lesión muscular de Motta obligó al equipo "azzurro" -que ya había realizado los tres cambios permitidos- a resignar completamente la posesión y la posibilidad de atacar.
Ante esa situación, España sacó provecho de su buen juego con la pelota y selló el resultado en los momentos finales.
Torres se convirtió en el primer jugador en anotar goles en dos finales de Eurocopa al marcar el 3-0 a seis minutos del final, momentos antes de asistir a Mata en el cuarto y definitivo tanto.