Aunque la candidatura de la actual mandataria era dada como segura, no había sido formalizada. Incluso surgió un pequeño movimiento que defendía la postulación del ex-presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Brasilia. El Partido de los Trabajadores (PT), mayor fuerza de izquierda de América Latina y que gobierna Brasil desde 2003, proclamó este sábado en su convención nacional la candidatura de la presidenta, Dilma Rousseff, a un segundo mandato en las elecciones del 5 de octubre próximo.
En la convención también fue sellada la alianza con el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) y la candidatura de Michel Temer a la reelección a vicepresidente como compañero de fórmula de la jefa de Estado.
Dicha alianza fue aprobada hace dos semanas por el PMDB, mayor fuerza electoral de Brasil y principal aliado del PT en la coalición oficialista.
En el encuentro, celebrado en Brasilia, Rousseff y Temer estuvieron respaldados por el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, el líder nacional del PT, Rui Falcao, además de presidentes de partidos aliados, varios exministros, decenas de parlamentarios, gobernadores, alcaldes y líderes políticos regionales.
Pese a que la candidatura de Rousseff era dada como cierta desde hacía varios meses por el PT, hasta ahora no había sido formalizada, lo que permitió que en los últimos meses surgiera un movimiento dentro del partido que defendía la postulación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010).
Durante la convención, Falcao volvió a subrayar la necesidad de implementar una "reforma del actual sistema político electoral" y la "democratización de los medios de comunicación" la cual, según dijo, "los oligopolios intentan caracterizar como censura".
El presidente nacional del PT también denunció los abucheos que Rousseff recibió durante el partido inaugural del Mundial de fútbol 2014 y precisó que el "tiro les salió por la culata" porque la presidenta fue cercada por la "solidaridad unánime de los que condenan la violencia".
Pese a que Rousseff aún lidera las encuestas de intención de voto con gran ventaja, la jefe de Estado viene perdiendo terreno y los últimos sondeos indican que ya no garantiza su reelección sin necesidad de disputar una segunda vuelta, exigida cuando ninguno de los candidatos obtiene más de la mitad de los votos.
De acuerdo con un sondeo del Instituto Ibope, si las elecciones fuesen hoy, Rousseff obtendría el 39 % de los votos, frente al 21 % del senador Aecio Neves, cuya candidatura fue proclamada el pasado sábado por el opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), y el 10 % del exgobernador de Pernambuco Eduardo Campos, candidato del Partido Socialista Brasileño (PSB).
Según el sondeo, Rousseff y Neves tendrían que medirse en una eventual segunda vuelta, en la que la jefe de Estado se reelegiría con el 43 % de los votos frente al 30 % del candidato del PSDB.