Los sicarios -que utilizan las rutas por Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Tamaulipas para secuestrar a los indocumentados- exigen a las familias de los migrantes entre US$2.000 a US$16.000 para liberarlos.
México D.F. Anualmente unos 20 mil indocumentados procedentes de Centroamérica y Sudamérica cruzan México con el fin de llegar a Estados Unidos. De ellos, al menos la mitad ha sufrido las extorsiones del cártel de Los Zetas.
Así lo señalaron fuentes castrenses al diario mexicano La Jornada. Y es que, Los Zetas -relacionados con la matanza de 72 migrantes en Tamaulipas- han encontrado en el secuestro de indocumentados, su principal recaudación de recursos, haciendo valer su control en plazas del sureste y el Golfo del país.
Los sicarios exigen a las familias de los migrantes secuestrados entre 25.000 y 200.000 pesos (entre US$2.000 a US$16.000) para liberarlos.
La ruta utilizada por Los Zetas para plagiar a quienes intentan llegar a Estados Unidos pasa por Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Tamaulipas. También utilizan un tramo del sur de Tabasco.
Ante este escenario, el gobierno de Felipe Calderón emitió una alerta a países de Centro y Sudamérica para que informen en sus países sobre el riesgo que implica migrar a Estados Unidos, a través del Golfo México.
Según la información del Ejército Mexicano, Los Zetas tienen control en la zona fronteriza entre Guatemala, El Salvador y Honduras.
El cártel secuestra a los migrantes en estaciones de autobuses, hoteles y estaciones ferroviarias, y los obligan a proporcionar teléfonos de sus familiares para que éstos paguen el rescate.
En el caso de que los indocumentados acepten trabajar para Los Zetas, recién hasta 5 mil pesos (US$400) a la semana por realizar robos, secuestros o asesinatos.