El Ministerio del Interior y de Justicia, a través de la Dirección de Gestión, informó que por ola invernal desde el 6 de abril de 2010 a 3 de marzo de 2011 las personas afectadas por emergencia asciende a 2.440.221, las familias son 514.990, fallecidas 323 personas, heridas 312, desaparecidos 66.
El Ministerio del Interior y de Justicia, a través de la Dirección de Gestión, informó que por ola invernal desde el 6 de abril de 2010 a 3 de marzo de 2011 las personas afectadas por emergencia asciende a 2.440.221, las familias son 514.990, fallecidas 323 personas, heridas 312, desaparecidos 66. Por el concepto de viviendas destruidas se reportan 9.972 y averiadas 359.534.
Los 10 departamentos con mayor número de personas afectadas alcanzan el 77.6% del total nacional y son: Bolívar, Magdalena, Guajira, Atlántico, Córdoba, Choco, Sucre, Cesar, Valle del Cauca y Cauca.
El mayor número de afectados se presentan por inundaciones, el 89.80%. Los deslizamientos han generado el 65.94% de fallecimientos, el 55.76% de los heridos y el 71.21% de los heridos. Por parte de la Dirección de Gestión del Riesgo, a través del Fondo Nacional de Calamidades, se ha entregado ayuda humanitaria y apoyos a las comunidades afectadas por la Ola Invernal por $93.488.076.834.
Este jueves en la noche se registró la muerte de dos personas, producto de una avalancha, en el departamento de Santander. Tal situación se sumó a la caída de un puente, el miércoles anterior, tambien en Santander, que dejó una persona muerta.
De otro lado, a partir de este viernes las localidades de Usaquén, Chapinero, Santa Fe, Rafael Uribe, Ciudad Bolívar, Suba y San Cristóbal, en Bogotá, estarán bajo monitoreo especial ante el inminente regreso de las lluvias.
En atención a lo anterior, y teniendo en cuenta la llegada de la primera temporada lluviosa del año, que según los modelos de predicción climática, las lluvias estarán por encima del promedio, la Dirección de Gestión del Riesgo, del Ministerio del Interior y de Justicia, recomienda a las autoridades municipales, a los Comités regionales y locales para la Prevención y Atención de Desastres, CREPADS y CLOPADS, Corporaciones Autónomas Regionales, activar los planes de emergencia y contingencia y realizar las acciones necesarias para reducir los riesgos relacionados a éste fenómeno.
