La muerte de Juan de Dios Usuga, alias "Giovanny", máximo líder de "Los Urabeños" y por quien el gobierno ofrecía una recompensa de hasta US$2,5 millones, se registró cerca al municipio de Acandí, en el selvático departamento del Chocó, en el noroeste del país, cerca a la frontera con Panamá.
Bogotá. El jefe de una banda criminal de Colombia acusado de exportar varias toneladas de cocaína a los carteles mexicanos y solicitado en extradición por Estados Unidos murió este domingo durante un operativo de la Policía, informó el gobierno de ese país.
La muerte de Juan de Dios Usuga, alias "Giovanny", máximo líder de "Los Urabeños" y por quien el gobierno ofrecía una recompensa de hasta US$2,5 millones, se registró cerca al municipio de Acandí, en el selvático departamento del Chocó, en el noroeste del país, cerca a la frontera con Panamá.
"La Policía dio de baja en el Chocó a alias Usuga, cabecilla de los Urabeños y capturó a varios de sus cómplices. Buen comienzo de año", dijo el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en un mensaje por Twitter.
El mandatario también lamentó la muerte de un policía durante la operación.
"Los Urabeños" es una de las bandas criminales más activas de Colombia junto con "Los Rastrojos", "Los Paisas" y "Las Aguilas Negras".
Las denominadas bandas criminales emergentes están conformadas por antiguos paramilitares de ultraderecha que depusieron las armas en una cuestionada negociación de paz con el Gobierno y están directamente vinculadas con la producción y el tráfico de cocaína, de acuerdo con fuentes de seguridad.
Estos grupos armados ilegales se convirtieron en la principal amenaza para los derechos humanos en el país sudamericano y en el 2010 fueron responsables de un aumento del 40 por ciento en las masacres, de acuerdo con Naciones Unidas.
Las autoridades de Estados Unidos intensificaron sus esfuerzos por reprimir a las bandas colombianas que envían cocaína a los cárteles en México, en donde se enfrentan contra las fuerzas de seguridad del país.
Las bandas criminales ocuparon los espacios que dejaron los escuadrones paramilitares de ultraderecha y los desmantelados cárteles de Medellín, Cali y el Norte del Valle.
Colombia es considerado el primer productor mundial de cocaína con alrededor de 350 toneladas anuales, actividad de la que la guerrilla también obtiene millonarios ingresos, mientras mantiene enfrentamientos con las Fuerzas Armadas en un conflicto de casi cinco décadas.