Modelos de dispersión creados por la estadounidense NOAA, National Oceanic and Atmospheric Administration, muestra los diversos “caminos” por las que las cenizas se dispersan.
Más alguno ha aprovechado la erupción sorpresiva del Volcán Calbuco para hacer el chiste: “Volcán maldito, me dejó la cabeza blanca”. Es que las cenizas son una oferta de canas casi instantáneas para los que se arriesgan a la intemperie, bajo la “pluma” que emite el volcán.
Por ahora, el polvo volcánico ya cae sobre Villa La Angostura y Neuquén (en Argentina), hacia el noreste; Calbuco (en Chile), al norte; y hay reportes de algunas en el noroeste, en zonas tan lejanas como Arauco y Concepción (a unos 500 kilómetros).
Lo anterior resulta algo sorprendente. La idea básica sobre la dispersión de las cenizas que emite un volcán indica que éstas se moverán en el sentido del viento dominante que, en el caso del Calbuco, suelen estar orientados hacia el oeste y/o noroeste.
Sin embargo lo anterior es falso. Por incompleto. Sucede que el “cielo”, más que una caja de aire, es una “torta” con distintas capas de aire. Cada una de ellas con temperaturas y vientos potencialmente distintos. Lo que hace la “pluma” es meterse con la prepotencia de la inyección que le provee la fuerza volcánica en varias de estas capas. En el caso del Calbuco, ella ha llegado a subir unos 17 kilómetros. De ahí que la dispersión puede tomar direcciones aparentemente distintas. ¿Cuáles? La NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration), agencia gubernamental estadounidense que se preocupa de temas atmosféricos y oceánicos, creó un mapa (ver infografía) sobre la dispersión de las cenizas. Para ello utiliza Los recuadros más altos muestran la propagación a alturas más altas y los más de abajo los de alturas menores y sobre la superficie. Cómo se observa en ellos, las cenizas que más se elevaron se mueven sobre la zona de Los Ríos y entran al Océano Pacífico frente a Arauco.
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El trabajo, de carácter predictivo, era bastante certero hasta las seis de la mañana de hoy, pero podría haber cambiado si el sistema de altas presiones presente cuando ocurrió la erupción, se está alterando, generando vientos diferentes. Sea como sea, por unos días o semanas las “canas” serán más populares que nunca.