Según el organismo, el volcán, de 5.029 metros de altura, registró a partir del pasado 12 de septiembre un incremento en su actividad sísmica interna caracterizada por una serie de sismos.

Quito. La Secretaría de Gestión de Riesgos de Ecuador (SNGR) dispuso este martes el cambio de alerta amarilla a naranja en las zonas de influencia del volcán Tungurahua, situado en el centro andino del país, debido a un incremento en la actividad eruptiva del macizo.

La dependencia informó en un comunicado que la medida fue adoptada por su titular, Susana Dueñas, con base en el último informe especial del volcán emitido la víspera por el Instituto Geofísico.

En dicho informe "se estima que una reactivación del volcán Tungurahua en un plazo de corto a inmediato plazo (próximos días a horas) es posible", indicó la SNGR.

El Instituto Geofísico ha advertido de dos posibles escenarios eruptivos potenciales: una reactivación rápida, de estilo vulcaniano, con una gran columna eruptiva y flujos piroclásticos; y una reactivación paulatina, de estilo estromboliano, con explosiones moderadas y caídas de ceniza.

Según el organismo, el volcán, de 5.029 metros de altura, registró a partir del pasado 12 de septiembre un incremento en su actividad sísmica interna caracterizada por una serie de sismos.

Además, desde el 24 de septiembre la actividad aumentó registrándose 97 sismos de largo periodo y dos tremores en zonas cercanas al cráter del volcán.

La Secretaría de Gestión de Riesgos agregó que se dispuso a los gobernadores y alcaldes de las provincias de Tungurahua, y la vecina de Chimborazo, la activación de los planes de contingencia y la actualización de los escenarios en función de la evolución del fenómeno.

También se dispuso a los Comités de Operaciones de Emergencia (COE) de ambas provincias que se mantengan en estado de alerta y operativos para realizar acciones inmediatas que se requieran para proteger a la ciudadanía, así como afrontar cualquier situación negativa que se pudiere generar por el fenómeno natural.

La última erupción del volcán ocurrió en 1999, y producto de ésta, se ha observado una deformación que muestran una posible intrusión magmática, según el Instituto Geofísico.