Poco después del amanecer del domingo, los equipos de rescate contactaron por voz con otra persona atrapada en el Costa Concordia. "Estamos haciendo lo imposible para llegar a esta persona", dijo el portavoz de los guardacostas Lucinao Nicastro en la televisión italiana.
Giglio. Los equipos de rescate buscaban a casi 40 personas que continuaban desaparecidas a primera hora del domingo, pasadas más de 24 horas desde que un crucero con más de 4.000 pasajeros a bordo naufragó junto a la costa occidental italiana, causando tres muertos y unos 70 heridos.
Poco después del amanecer del domingo, los equipos de rescate contactaron por voz con otra persona atrapada en el Costa Concordia. "Estamos haciendo lo imposible para llegar a esta persona", dijo el portavoz de los guardacostas Lucinao Nicastro en la televisión italiana.
Tras la medianoche, los equipos de rescate hallaron dos personas, ambos surcoreanos, vivos en una cabina tras contactar con ellos por voz desde varios pisos de distancia, y fueron trasladados a tierra.
El capitán del barco de lujo de 114.500 toneladas está detenido acusado de homicidio involuntario múltiple, causar un naufragio y abandonar el barco, dijo la policía italiana.
Los pasajeros, algunos de los cuales dijeron que sentían que se repetía el desastre del Titanic, contaron historias de personas saltando por la borda y otros luchando por chalecos salvavidas presas del pánico cuando el barco golpeó una roca y encalló cerca de la isla de Giglio, a última hora del viernes.
Dos turistas franceses y un miembro peruano de la tripulación fallecieron, y 38 personas no están aún localizadas.
El vasto casco del crucero de 290 metros permanecía semisumergido y volcado hacia un lado, cerca del pequeño puerto de Giglio, una isla pintoresca ubicada en una reserva marítima cerca de la costa de la Toscana. En el lateral se podía apreciar con facilidad una gran vía de agua.
Los equipos de rescate, que contaban con especialistas en buceo, recorrían las más de 2.000 cabinas del crucero, un hotel flotante con un enorme spa, siete restaurantes, bares, cines y discotecas.
Mientras continuaba la búsqueda, aumentaban las interrogantes sobre por qué la embarcación se acercó tanto a la costa y las quejas sobre cuánto se tardó en evacuar a los aterrados pasajeros después de que el barco encallara a última hora del viernes.
Después de que el capitán, Francesco Schettino, fuera detenido el sábado por la noche para ser interrogado, la investigación podría ampliarse, dijo el fiscal Francesco Verusio.
"Estamos investigando la posible responsabilidad de otras personas que podrían ser responsables de una maniobra tan peligrosa", dijo Verusio a la cadena de televisión SkyTG24. "Los sistemas de mando no funcionaron como deberían."
Temor por fallecidos. Tras uno de los peores accidentes marítimos en Italia en años, había temores de que la cifra de fallecidos pudiera aumentar tras una considerable confusión el sábado sobre el número de pasajeros desaparecidos.
Los magistrados dijeron que Schettino, cuyo barco trasportaba 4.229 pasajeros y tripulación, abandonó el crucero antes de que se hubiera evacuado a todos los pasajeros.
El operador, Costa Cruceros, división de Carnival Corp & Plc, la mayor compañía de cruceros del mundo, dijo que el Costa Concordia llevaba su rumbo habitual cuando se topó con una roca sumergida.
En una entrevista en televisión, Schettino dijo que la roca no aparecía en las cartas marítimas de la zona.
El presidente de Costa Cruceros, Gianni Ororato, dijo que el capitán "realizó una maniobra con el objetivo de proteger a los huéspedes y la tripulación" pero que esta se vio complicada "por la repentina inclinación del barco".
Tras una operación nocturna el viernes y sábado con helicópteros, barcos y botes salvavidas, muchos pasajeros habían abandonado la zona y fueron llevados al aeropuerto de Roma para volver a sus casas.
El barco se vio envuelto en un accidente el 22 de noviembre de 2008 cuando golpeó un muro de un puerto y resultó dañado cuando atracaba.