Los presidiarios, considerados de alta peligrosidad, huyeron la noche del jueves de la cárcel de mediana seguridad Marco Aurelio Soto, dijo la directora del Instituto Nacional Penitenciario (INP), Rosa Gudiel, en una conferencia de prensa.
Unos 22 reos miembros de la peligrosa pandilla Barrio 18 escaparon de la cárcel más poblada de Honduras custodiada por militares, supuestamente tratando de evadir su traslado a un penal de alta seguridad, dijo el sábado una funcionaria.
Los presidiarios, considerados de alta peligrosidad, huyeron la noche del jueves de la cárcel de mediana seguridad Marco Aurelio Soto, dijo la directora del Instituto Nacional Penitenciario (INP), Rosa Gudiel, en una conferencia de prensa.
La funcionaria afirmó que se iniciaron operaciones de búsqueda, pero no explicó por qué las autoridades no informaron antes de la fuga, la más importante en más de una década en esta nación centroamericana.
Las autoridades anunciaron la suspensión del director y varios custodios del penal, el más poblado del sistema con unos 5,000 reos. El sistema penitenciario de Honduras alberga unos 17.000 internos, en penales con capacidad para unos 8.000.
La fuga se produce en medio de operaciones del Gobierno para trasladar reos de alta peligrosidad, entre ellos miembros de las pandillas rivales Barrio 18 y Mara Salvatrucha (MS 13), a penales de alta seguridad recién construidos, dijeron autoridades.
En las últimas semanas, el Gobierno trasladó a alrededor de 750 reos, unos 600 de ellos miembros de las pandillas Barrio 18 y MS-13, desde el penal de la norteña ciudad de San Pedro Sula, a la cárcel de alta seguridad "El Pozo", en el noroeste, en busca de frenar las operaciones de extorsión y homicidios ordenados desde los penales.
Autoridades planean trasladar en breve a reos peligrosos internos en el penal Marco Aurelio Soto a la nueva cárcel de alta seguridad "La Tolva", ubicada en el este de Honduras, y debilitar las estructuras de reos que controlan los cerca de 30 centros penitenciarios en Honduras.