Los sindicatos, que representan a uno de cada cinco trabajadores, y el gobierno español acordaron mantener los servicios de transporte mínimos durante la paralización del jueves, incluyendo sólo 20% de los vuelos entre España y otros aeropuertos de Europa.
Madrid. El transporte aéreo, ferroviario y de buses estará severamente restringido en España debido a una huelga general convocada para la semana próxima por los principales sindicatos del país, en protesta por el alto desempleo y modificaciones a las leyes laborales que abaratarán el costo de los despidos.
Los sindicatos, que representan a uno de cada cinco trabajadores, y el gobierno español acordaron mantener los servicios de transporte mínimos durante la paralización del jueves, incluyendo sólo 20% de los vuelos entre España y otros aeropuertos de Europa.
Los trenes de acercamiento y subterráneos operarán a 35% de su capacidad normal durante las horas peak, y a 30% durante el horario regular, informó este sábado en un comunicado el Ministerio de Obras Públicas.
También los buses operarán a un nivel mucho menor al normal.
Sólo operarán 10% de los vuelos entre destinos en el continente. Entre el continente y las islas españolas, en tanto, operarán 50% de los viajes programados.
La reforma del mercado laboral que está realizando el Gobierno de centroderecha es la más reciente de una serie de severas medidas que España ha tomado en los últimos dos años en un intento por hacer más competitiva a su economía.
Las dudas acerca de las finanzas públicas de España han elevado los costos de endeudamiento del Estado, obligando al Gobierno a reducir drásticamente el gasto para bajar el déficit público. Al mismo tiempo, el desempleo ha trepado a 23% y la economía está entrando en su segunda recesión en tres años.
Una huelga general realizada en 2010 tuvo un impacto limitado -fue mayormente en transporte y manufactura- pero el paro de la semana próxima podría tener una mayor convocatoria porque la tasa de desempleo ha aumentado significativamente.
Además, en 2010 los socialistas del PSOE estaban en el poder, y ahora es el Partido Popular (PP) el que dirige el Gobierno.
Tradicionalmente, los sindicatos han tenido una alianza política con PSOE, por lo que las protestas han sido más apagadas durante los períodos del Gobierno socialista.
Los sindicatos habían propuesto recortes aun más drásticos para el transporte público el jueves, pero llegaron a un acuerdo con el Gobierno. En un país donde las personas dependen fuertemente del transporte público para llegar al trabajo, los sindicatos dependen de cortar los servicios de transporte público para obtener el máximo impacto con una huelga.