El 11 de enero se podrá saber el resultado final de las elecciones, cuando diversas partes del país voten en otras dos rondas electorales.
El Cairo. Los Hermanos Musulmanes de Egipto llamaron este sábado a sus rivales a aceptar la voluntad popular, después de una primera ronda electoral que puso a su partido camino a ganar la mayoría de escaños en el primer Parlamento electo democráticamente en seis décadas.
Los egipcios volverán a las urnas este lunes para una segunda ronda en sus elecciones parlamentarias.
El hombre designado por los gobernantes militares para liderar un nuevo gabinete dijo este sábado en la noche que aplazará el nombramiento de ministros al miércoles desde el domingo, como estaba estipulado originalmente.
El primer ministro designado por los militares, Kamal al-Ganzouri, dijo al periódico estatal al-Ahram que no quería designar a un nuevo ministro del Interior para que supervise la ley y el orden horas antes de las votaciones.
El resultado final de las elecciones parlamentarias egipcias no se conocerán hasta que otras partes del país voten en otras dos rondas electorales, un proceso que sólo se completará el 11 de enero.
Los resultados preliminares mostraron que los Hermanos Musulmanes islamistas lideran las preferencias y que otro grupo islamista de línea más dura, el Partido Salafi al-Nour, ocupa el segundo lugar, con un bloque liberal en la tercera posición.
Los Hermanos Musulmanes son el grupo político mejor organizado de Egipto y son populares entre los más pobres por sus antecedentes en labores de caridad.
La agrupación, que estaba proscrita aunque era tolerada por el Gobierno de Hosni Mubarak, ahora quiere tener un rol en la formación del futuro del país.
Sus rivales acusaron al partido de los Hermanos, llamado Libertad y Justicia, de usar la entrega de medicamentos y comida para influenciar a los votantes y de romper las reglas electorales con el uso de grupos de influencia afuera de las estaciones de votación.
Los Hermanos les pidieron a sus críticos que respeten el resultado.
"Llamamos a todos, y a todos los que se asocian con la democracia, a respetar la voluntad de la gente y a aceptar su decisión", dijo el partido en un comunicado tras la votación en primera ronda.
El mundo está atento al resultado electoral para ver hacia dónde va el futuro de Egipto, la nación árabe más poblada y hasta ahora un firme aliado de Estados Unidos, comprometido en preservar su tratado de paz con Israel y la lucha contra la militancia islamista.
Preocupación de Israel. Los rivales políticos de los Hermanos Musulmanes dicen que éstos quieren imponer la sharia (la ley islámica) en un país que además tiene una gran minoría cristiana. Pero el grupo islámico insiste en que seguirá una agenda moderada si llega al poder.
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, calificó de "muy, muy preocupante" el éxito inicial de los islamistas en el primer país árabe que reconoció al Estado judío.
"Es muy temprano para predecir cómo terminarán los cambios que enfrentamos. Podrían ser positivos en un contexto histórico. En un contexto inmediato, son problemáticos", dijo Barak este sábado al Canal Dos de Israel.
"Realmente espero que sea cual sea el gobierno que surja en Egipto, con cualquier constitución que surja en Egipto, que aún entienda que (...) no hay otra alternativa que mantener el marco de los acuerdos internacionales, entre ellos los acuerdos de paz con nosotros", añadió.
No entreguen sus derechos. Los partidos liberales intentaban evitar una fuga de los votos emitidos hasta este lunes y en dos rondas más de una elección escalonada que tomará seis semanas.
El Bloque Egipcio, una alianza de grupos liberales, publicó grandes anuncios en diarios para conseguir más apoyo.
"No disminuyan su apoyo (...) para alcanzar un Parlamento equilibrado que represente al pueblo egipcio y no entreguen sus derechos", decía el mensaje.
Como los Hermanos Musulmanes y los salafistas ultra conservadores tendrían una mayoría en la asamblea, los diarios debaten si se formará un bloque dominante.
Pero Nader Bakkar, portavoz del partido salafista al-Nour, dijo al diario al-Dustour que esa idea era prematura y que los resultados de la segunda y tercera rondas determinarían las posibilidades.