Nueva York, Nueva Jersey, Connecticut y Massachusetts declararon emergencias por el mal tiempo debido a la tormenta.
Boston. Una inusual nevazón en octubre azotó el fin de semana la costa noreste de Estados Unidos, dejando al menos tres muertos, provocando cortes de energía en más de dos millones de viviendas y forzando la cancelación de decenas de vuelos.
Nueva York, Nueva Jersey, Connecticut y Massachusetts declararon emergencias por el mal tiempo debido a la tormenta.
"Esperamos que la nieve siga cayendo desde la ciudad de Nueva York hasta Maine. Para el domingo por la mañana debería haber cubierto buena parte de estas áreas", afirmó el sábado Alan Reppert, meteorólogo de AccuWeather.com.
Las peligrosas condiciones en las autopistas provocaron accidentes y la muerte de un hombre en Colchester, Connecticut, sostuvo un funcionario del Departamento de Manejo de Emergencias local.
En Temple, Pensilvania, un hombre de 84 años murió cuando el peso de la nieve derrumbó a un árbol fuera de su casa, sostuvo la policía del sector.
Y un joven de 20 años fue electrocutado en Springfield, Massachusetts, al salir de su vehículo y tocar una baranda electrificada, afirmó un portavoz policial.
La nieve caía desde el centro de Pensilvania hasta Massachusetts luego de cubrir Virginia, Virginia Occidental y Maryland previamente el sábado, indicó AccuWeather.com.
Aunque los nevazones ya se han registrado antes en octubre en esta parte de Estados Unidos, esta tormenta podría batir récords en términos de nieve caída en total.
Está previsto que la ciudad de Nueva York reciba entre 7,7 y 15 centímetros de nieve antes de que la tormenta termine, sostuvo Reppert. El frente de mal tiempo también alcanzó la capital, Washington.
Numerosos cortes de energía provocados por la nieve, el hielo y la caída de árboles fueron reportados desde la zona media de la costa Atlántica hasta Nueva Inglaterra, dejando a millones de personas en la oscuridad.
En algunas partes, los cortes superaron a los generados por el huracán Irene, que dejó a 5 millones de personas sin electricidad cuando impactó la Costa Este a fines de agosto.
En Nueva York, la tormenta y el frío pusieron a prueba la resolución de los manifestantes del Movimiento Ocuppy Wall Street que protestan por la injusticia social y económica.
Afectados por los fuertes vientos, el sábado por la noche los manifestantes se refugiaron en sus tiendas en un parque del distrito financiero de Manhattan donde establecieron por primera vez su campamento hace seis semanas, el cual se propagó a ocupaciones similares en otras ciudades del país.
