Según el testimonio del sobreviviente que denunció la masacre, los inmigrantes –provenientes de El Salvador, Honduras, Ecuador y Brasil- fueron secuestrados por un grupo armado mientras intentaban alcanzar la frontera con Estados Unidos.
México D.F. Los cadáveres de 72 personas encontradas en un rancho del estado de Tamaulipas en el norte de México pueden corresponder a un grupo de indocumentados que intentaba cruzar el país hacia la frontera con Estados Unidos, informó este miércoles el portavoz de Seguridad del Gobierno mexicano, Alejandro Poiré.
Según las investigaciones preliminares, pendientes de confirmar, los fallecidos serían de El Salvador, Honduras, Ecuador y Brasil.
Un testigo y sobreviviente de la masacre acudió a las autoridades para declarar que los inmigrantes fueron secuestrados por un grupo armado mientras intentaban alcanzar la frontera con Estados Unidos, se explicó en una rueda de prensa.
El testigo, de nacionalidad ecuatoriana, se encuentra hospitalizado ya que sufrió una herida de bala en la garganta, señaló el portavoz de la Procuraduría General de la República, Ricardo Nájera.
Tras la declaración del testigo, las fuerzas de la Marina de México se desplegaron en la comunidad de San Fernando, en Tamaulipas, donde se produjo un enfrentamiento en el que murieron un militar y tres delincuentes.
Tras estos hechos, las autoridades hallaron en un rancho cercano los cadáveres de 72 personas, 58 varones y 14 mujeres, cuyos restos serán trasladados en las próximas horas al Servicio Médico Forense de Ciudad Victoria, capital estatal.
En una rueda de prensa conjunta, Salvador Beltrán del Río, subsecretario para América y el Caribe de la Cancillería mexicana, explicó que se ha informado de los hechos a las embajadas de los cuatro países de donde presuntamente procedían los indocumentados para que colaboren en las tareas de identificación.
Las autoridades creen que el grupo delictivo con el que se enfrentaron los infantes de la Armada fueron los que asesinaron a esas personas.
Las autoridades detuvieron a un menor de edad, decomisaron 21 armas largas, 101 cargadores para armas de fuego de diferentes calibres, cuatro chalecos antibalas, uniformes camuflaje, fornituras y un casco y cuatro camionetas, según un comunicado de la Marina de México.