La mayoría de los manifestantes eran adultos jóvenes, muchos de ellos con banderas de la Unión Europea mientras otros portaban carteles como "Estoy con la UE". Cantaban: "¿Que queremos hacer? Estar en la UE", mientras marchaban por el distrito de Westminster.
Londres. Miles de manifestantes tomaban el sábado el centro de Londres para protestar contra la votación de la semana pasada a favor de abandonar la Unión Europea, un resultado que ha sumido a Reino Unido en un caos político y que rechaza la mayoría de los habitantes de la capital británica.
La mayoría de los manifestantes eran adultos jóvenes, muchos de ellos con banderas de la Unión Europea mientras otros portaban carteles como "Estoy con la UE". Cantaban: "¿Que queremos hacer? Estar en la UE", mientras marchaban por el distrito de Westminster.
"Me sentí realmente aturdido la mañana siguiente de la votación", dijo el manifestante Nathaniel Samson, de 25 años, de Hertfordshire, al norte de Londres.
"Sentí una profunda incertidumbre sobre mi futuro", añadió. "Me manifiesto para mostrar mi descontento. Acepto el resultado, pero esto es para demostrar que no lo aceptaremos tranquilamente".
Londres votó en un 60 por ciento a favor de permanecer en la UE en el referendo del jueves 23 de junio. Los jóvenes en su mayoría optaron por permanecer en el bloque, pero el 52 por ciento de los electores de todo el país se inclinaron por el llamado "Brexit".
El organizador de la manifestación, el graduado del King's College Kieran MacDermott, dijo: "Podemos evitar el Brexit rechazando que el referendo tenga la última palabra y quitando nuestro dedo del botón de auto destrucción". El Parlamento debería tener la última palabra en si Reino Unido debe marcharse, dijo a la BBC.
La votación ha generado una batalla por quién sucederá al primer ministro David Cameron en el partido Conservador, que anunció su renuncia tras el resultado.
El principal partido de la oposición, los laboristas, también atraviesan un profundo debate, con la mayoría de sus parlamentarios a favor de retirar el apoyo al líder del partido, Jeremy Corbyn, después de lo que calificaron como una contribución sin brillo a la campaña del referendo.