Se teme que si el régimen de Kim Jong-un pudo disparar un Hwasong 12, también puede desarrollar a mediano plazo un misil balístico intercontinental (ICBM) con cabeza nuclear.
Corea del Sur. El gobierno de Pyongyang volvió a lanzar un misil este domingo. La trayectoria del cohete, que voló hacia el este y cayó en el Mar de Japón o Mar del Este, fue de unos 500 kilómetros. Así lo informaron las Fuerzas Armadas de la vecina Corea del Sur, indicando que se trataba de un "proyectil no identificado” disparado "desde un punto cercano a Pukchang, en la provincia de Pyongyang del Sur”.
En un breve comunicado, el Estado Mayor Conjunto (JCS) recuerda que el incidente tiene lugar una semana después del lanzamiento de un nuevo proyectil balístico de medio alcance –el Hwasong 12– que atizó la tensión más allá de la península coreana.
Se teme que si el régimen de Kim Jong-un pudo disparar un Hwasong 12, también puede desarrollar a mediano plazo un misil balístico intercontinental (ICBM) con cabeza nuclear.
Ese tipo de tecnología constituiría una amenaza directa para uno de los archienemigos de Pyongyang, Estados Unidos.
Portavoces del JCS explicaron a la agencia Yonhap que, aunque todavía se analiza el tipo de proyectil lanzado este 21 de mayo, ya es posible descartar que se trate de un ICBM. Los insistentes ensayos de armas de destrucción masiva de Pyongyang han endurecido la retórica del Gobierno estadounidense.
Tras la llegada al poder de Donald Trump, Washington ha insinuado la posibilidad de realizar ataques preventivos contra Pyongyang.
Los expertos consideran que con estos últimos ensayos el régimen de Kim Jong-un estaría poniendo a prueba al nuevo Gobierno surcoreano del presidente Moon Jae-in, que llegó al poder hace menos de dos semanas con la promesa de mejorar los lazos con Pyongyang manteniendo al mismo tiempo el mecanismo de sanciones.