Bajo el lema "No habrá Mundial", más de 13.000 personas habían confirmado su asistencia a la manifestación, aunque -finalmente- la lluvia que cayó en la tarde sabatina dejó el número de participantes más reducido.

Río de Janeiro. La policía brasileña detuvo este sábado a 120 personas tras una manifestación en contra de la organización del Mundial de fútbol en el país en Sao Paulo (sureste de Brasil), tras protagonizar incidentes vandálicos, en una protesta que se finalizó con al menos siete heridos, informaron fuentes policiales.

La movilización, en la que participaron unas mil personas en el centro de Sao Paulo, según la Policía Militarizada, transcurrió tranquilamente hasta que un grupo de enmascarados, algunos de ellos con trozos de madera, empezaron a reventar las puertas de las agencias bancarias y las cabinas telefónicas que encontraron por su paso, así como quemar los contenedores de basura.

En la protesta, en la que por primera vez participó la "Tropa de Brazo", un cuerpo de la policía militarizada no armado especializado en artes marciales para identificar y detener a los manifestantes que usaran la violencia, la policía optó lanzar gases lacrimógenos para dispersar a los violentos.

Bajo el lema "No habrá Mundial", más de 13.000 personas habían confirmado su asistencia a la manifestación, aunque finalmente, la lluvia que cayó en la tarde sabatina en Sao Paulo dejó el número de participantes mucho más reducido. Según la policía, cinco agentes y dos manifestantes resultaron heridos como consecuencia de los enfrentamientos.

El pasado mes de enero, ya se realizó una manifestación contra el Mundial de forma simultánea en cerca de treinta ciudades de todo el país.