El suministro ha sido interrumpido en 25 de las 37 comunas (distritos) de la Región Metropolitana y, si bien en un principio la empresa anunció que el corte se prolongaría durante 24 horas, este sábado advirtió de que el servicio podría no estar normalizado hasta la tarde de este domingo.
Un aluvión en zonas de la cordillera que enturbió el caudal de un río provocó este sábado un nuevo corte del agua potable en Santiago de Chile, el segundo en tres semanas, que afectó a unos 4 millones de usuarios.
"En un principio eran 1.060.000 clientes. Estamos hablando de más de 4 millones de personas afectadas con este corte, casi el 80 % de la Región Metropolitana (de Santiago)", explicó a Radio Cooperativa la intendenta (gobernadora) en funciones, Caterina Klein.
Los deslizamientos de tierra se produjeron en la localidad de San José de Maipo, vecina a la capital chilena y enclavada en la precordillera de Los Andes, debido a una imprevista lluvia veraniega a más de 4.000 metros de altitud, unida al deshielo y a las altas temperaturas.
La empresa Aguas Andinas informó alrededor de las 20:00 horas (23.00 GMT) de este viernes que, debido a los índices de turbiedad en el agua que baja por ese sector, sería necesario paralizar el funcionamiento de las plantas procesadoras que abastecen a la capital, de 6,2 millones de habitantes.
En total, el suministro ha sido interrumpido en 25 de las 37 comunas (distritos) de la Región Metropolitana y, si bien en un principio la empresa anunció que el corte se prolongaría durante 24 horas, este sábado advirtió de que el servicio podría no estar normalizado hasta la tarde de este domingo.
El pasado martes 22 de enero, otro aluvión ocurrido en la misma zona obligó también a cortar el suministro durante un día, pero en esa ocasión el anuncio se hizo a medianoche y muchos vecinos se despertaron con la sorpresa de no tener agua disponible.
Esta vez, el corte de Aguas Andinas, controlada por la española Aguas de Barcelona (Agbar), ha provocado un menor impacto al producirse en fin de semana. Además, al ser época veraniega, muchos habitantes se encuentran de vacaciones fuera de la capital.
Por otra parte, muchos edificios cuentan con depósitos con capacidad para abastecer de agua a sus vecinos durante al menos un día, y se han dispuesto camiones aljibe para aquellos que no tienen otra alternativa.
Las autoridades han sostenido este sábado una reunión de coordinación de emergencia en la Intendencia Metropolitana.
"El nivel de turbiedad ha ido bajando rápidamente desde 380.000 UNT (unidad nefelométrica de turbiedad), y ahora estamos en un nivel de 28.000", señaló el ministro de Obras Públicas en funciones, Lucas Palacios, al término de ese encuentro.
"Esperamos que siga en esa tendencia para que la empresa pueda comenzar a procesar el agua en las próximas horas", indicó Palacios.
Según explicó, las plantas pueden empezar a funcionar por debajo de las 25.000 UNT, aunque normalmente operan con un nivel de 5.000 UNT. En comparación, señaló que en la emergencia ocurrida hace tres semanas se alcanzaron las 100.000 UNT.
Desde el pasado miércoles la Región Metropolitana de Santiago se mantiene con "alerta temprana preventiva" para los sectores cordilleranos y precordilleranos por las constantes precipitaciones, pese al verano austral que vive esta país.