La pareja tenía discusiones con frecuencia y aparentemente la mujer actuó en estado de emoción violenta, que derivó en el disparo en la cabeza de su esposo. Una de las hipótesis que se maneja es de una supuesta infidelidad de Carlos Soria.

La Justicia argentina entiende que el gobernador de Río Negro, Carlos Soria, fue asesinado por su esposa, Susana Freydoz. Así lo manifestó el presidente del Superior Tribunal de Justicia de esa provincia, Víctor Sodero Nievas, a La Nación.

Aparentemente la mujer actuó en estado de emoción violenta que derivó en el disparo en la cabeza de su esposo, el día 1º de enero a la hora 4.05, después de celebrar la llegada de Año Nuevo. De esta forma se cambia la caratula del caso que en primer momento fue catalogado como accidente y ahora pasa a ser un hecho criminal.

El suceso causó conmoción en la provincia y en toda Argentina, por lo que Sodero Nievas decidió dar declaraciones para mantener informada a la población, por encima del secreto sumarial, dado el estado de excepción que significaba el crimen del gobernador.

"No lo quise matar". Hay varias pruebas que comprometen a Freydoz. Testigos señalaron que poco después del hecho la mujer expresó ante policías y familiares: "No lo quise matar".

Además, las pericias determinaron que se encontraron restos de pólvora en sus manos y se comprobó que el disparo se realizó desde más de 50 centímetros de distancia, lo que descarta la idea de un forcejeo.

Para Sodero Nievas, que maneja la información del sumario policial, "se trató de un homicidio debido a un conflicto conyugal".

Una de las hipótesis que se maneja es de una supuesta infidelidad de Soria, quien le habría planteado a su mujer que se instalaría en la residencia oficial del gobernador en Viedma pero sin ella, lo que enfureció a Freydoz, quien estaba cansada de los maltratos y sospechaba de una relación de infidelidad de su marido.

"Las discusiones entre la pareja venían desde la campaña (para la gobernación de Río Negro)", dijo Sodero Nievas.

"Había conflictos en la pareja porque eran dos fuertes personalidades. Las discusiones venían desde la campaña. Todos los testimonios son concordantes en reconocer que hubo intensas discusiones y el enfrentamiento final es el que terminó con este homicidio", agregó el magistrado, quien consideró que el caso está resuelto en un 70%.

Hasta el momento Freydoz no ha podido declarar porque se encontraba en estado de shock.

La mujer permanece en la casa de una hermana, medicada con sedantes y con asistencia psicológica, y cuando esté en condiciones de poder contestar será indagada por el juez.