Robert Heimberger, presidente de la oficina estatal del crimen de Bavaria, dijo que el material encontrado en la casa del perpetrador mostró que el pistolero compró su arma en la llamada red oscura, un área de Internet accesible sólo a través de programas computacionales.
Munich. El pistolero alemán-iraní de 18 años que mató a nueve personas en Múnich el viernes comenzó a planificar el ataque hace un año tras visitar el lugar de un tiroteo en una escuela en el sudoeste de Alemania que dejó 15 muertos en 2009, dijo el domingo un funcionario estatal de Bavaria.
Robert Heimberger, presidente de la oficina estatal del crimen de Bavaria, dijo que el material encontrado en la casa del perpetrador mostró que el pistolero era un ávido usuario de videojuegos violentos que compró su arma -una pistola Glock 17- en la llamada red oscura, un área de Internet accesible sólo a través de programas computacionales especiales.
Heimberger agregó que los padres del pistolero están impactados y que no pudieron ser entrevistados. Un funcionario de la oficina del fiscal estatal dijo que entre las víctimas del tiroteo no había ningún compañero de clases del atacante.
El presidente de la oficina estatal contra el crimen de Bavaria, Robert Heimberger, dijo que el pistolero, que los medios alemanes identificaron como Ali David Sonboly, llevaba otras 300 balas en su mochila y su pistola cuando fue hallado muerto con una herida de bala.
Después de que la policía registró la habitación del atacante, donde encontraron un libro sobre tiroteos provocados por adolescentes, el jefe de policía de Múnich, Hubertus Andrae, prácticamente descartó un vínculo islamista en el atentado.
"En base a los registros, no hay indicios de ningún tipo de una conexión con Estado islámico" o el tema de los refugiados, dijo en una conferencia de prensa.
"Se encontraron documentos sobre tiroteos masivos, de modo que el perpetrador obviamente investigó sobre este tema intensamente", agregó.
El hombre armado nació y creció en el área de Múnich y estuvo un tiempo bajo tratamiento psiquiátrico y no había evidencias que sugieran que tuvo un cómplice, sostuvo Andrae.
El ministro del Interior, Thomas de Maizière, dijo que también era demasiado pronto para asociar el tiroteo de Múnich con Breivik, quien en 2011 mató a 69 asistentes a un campamento juvenil de verano horas después de quitarle la vida a otras ocho personas al detonar un coche bomba en Oslo.