El presidente de Guatemala, el general retirado Otto Pérez Molina, y la mandataria de Costa Rica, Laura Chinchilla, también participaron en esta ceremonia maya junto a sus familias.
Guatemala, EFE. El pueblo maya guatemalteco pidió este viernes la unidad y la paz en el país centroamericano durante una ceremonia con la que le dio la bienvenida a un nuevo amanecer conocido como Oxlajuj Ak'abal.
"Llegó el momento que el pueblo maya se levante y busque la paz y la armonía", dijo un guía espiritual que presidió el ritual ante el Templo del Gran Jaguar, en el Parque Nacional de Tikal, que fue la cuna de esa ancestral cultura.
Acompañados de notas de la marimba, los pueblos originarios recibieron los primeros rayos del nuevo sol en esta región del norte de Guatemala, fronteriza con México y Belice.
El guía espiritual insistió en que como pueblo maya, en la nueva era que inició hoy, buscarán la unidad.
También reclamó respeto para estas comunidades en Guatemala, así como que se les permita ingresar a los lugares sagrados sin ninguna restricción porque allí "tenemos poder, salud y vida".
El sacerdote indígena manifestó que "es triste contar la historia de los pueblos mayas" y que no alcanzaría el tiempo para decir lo que ha sucedido con esta cultura.
El presidente de Guatemala, el general retirado Otto Pérez Molina, y la mandataria de Costa Rica, Laura Chinchilla, también participaron en esta ceremonia maya junto a sus familias.
Durante toda la noche, el Templo del Gran Jaguar, fue el principal testigo de una histórica ceremonia que incluyó documentales y danzas para agradecer al Ajaw (Creador y Formador) la llegada de una nueva era y el fin del 13 Ba'ktun, un ciclo de 5.200 años en el calendario maya.