Según expertos, la historia de los mineros es una narración que cuenta con todo para atrapar a la audiencia: peligro, suspenso, la lucha entre la vida y la muerte y un final feliz.
El rescate de los 33 mineros en Chile, que fue visto por más de 1.000 millones de personas a nivel mundial, marcó un hito televisivo mundial que puede compararse a la llegada del hombre a la Luna.
El sitio de internet de la Universidad de Texas, “Knight Center for Journalism in the Americas”, señala que la transmisión del rescate puede ser comparado con la llegada a la Luna, la visita del Papa Juan Pablo II a Polonia tras la caída del Muro de Berlín o la abortada misión del Apolo 13.
Para el analista de medios, Howard Kurtz, se trató de “una historia de la televisión perfecta” con “un toque de peligro, pero con un final feliz esperado”, informó La Nación.
Por su parte, el profesor de periodismo de la Universidad de Hong Kong, Yuen Ying Chan, señaló que “la gente está fascinada, porque no sólo es una historia de fuerte interés humano, sino que se trata de un gran número de personas, tiene mucho de suspenso, se refiere a la vida y la muerte, y en última instancia enciende la curiosidad de la gente”.
La lucha por las exclusivas. Mientras, los medios de comunicación luchan por conseguir un contrato exclusivo con los protagonistas de esta odisea.
En El País de España se informó que el diario alemán de mayor circulación, Bild, ofreció US$45 mil por 72 horas de entrevista y el contrato lo habría firmado en propio minero dentro del yacimiento, informó Infobae.
Otro objetivo periodístico deseado es sacar la fotografía a la pequeña Esperanza, quien nació mientras su padre, Ariel Ticona, se encontraba atrapado en la mina "La foto se la llevará el que más dinero ofrezca por ella", dijo Elisabeth, la mujer de Ariel.