La fortaleza de El Niño, que puede generar altas temperaturas a lo largo de Asia y el este de África, además de fuertes lluvias e inundaciones en Sudamérica, sacudirá a las economías que dependen fuertemente de la agricultura.
Sydney. La presencia del fenómeno climático de El Niño en el Océano Pacífico está aumentando y se espera que crezca su desarrollo, elevando las temperaturas y reduciendo las lluvias el próximo año, dijo este martes el Servicio de Meteorología de Australia.
En un comunicado publicado en su sitio de Internet, el servicio dijo que la temperatura de la superficie del océano en todas las áreas de seguimiento ha estado más de 1 grado celsius por encima del promedio durante diez semanas consecutivas -dos semanas más que los niveles récord de 1997.
"Todos los modelos climáticos internacionales del Servicio de Meteorología indican que es probable que El Niño se fortalezca y que persista hacia inicios del 2016", dijo el comunicado.
El calentamiento ha sido exacerbado por la debilidad o la reversión de los vientos sobre grandes partes del Océano Pacífico. El impacto de El Niño a menudo alcanza un máximo al final de la primavera en el hemisferio sur o a principios del verano boreal antes de debilitarse en el nuevo año, agregó el servicio.
La fortaleza de El Niño, que puede generar altas temperaturas a lo largo de Asia y el este de África, además de fuertes lluvias e inundaciones en Sudamérica, sacudirá a las economías que dependen fuertemente de la agricultura. También afectaría las cadenas de suministro de materias primas como el arroz, el maíz y el aceite de palma.
Australia ya ha reducido sus pronósticos de producción para el trigo, el algodón y otras materias primas agrícolas en el año fiscal 2015/16 en momentos en que el fenómeno climático afecta al país y reseca las tierras agrícolas por segunda vez en cinco años.
Previamente este mes, el Servicio Meteorológico de Japón dijo que El Niño continúa, reiterando que existen fuertes probabilidades de que se siga desarrollando en el invierno boreal, mientras que una oficina de meteorología del gobierno de Estados Unidos advirtió que es probable que se extienda por otros nueve meses.