Un portavoz de la Policía local confirmó el número de víctimas mortales a la agencia estatal bangladeshí BSS, tras asegurar que los equipos de rescate han recuperado en las últimas horas 27 nuevos cadáveres.
Nueva Delhi, EFE. El derrumbe el pasado 24 de abril de un complejo textil a las afueras de Dacca en el que se producía ropa para marcas internacionales ha causado al menos 660 muertos, según los últimos datos divulgados este lunes por la Policía bangladeshí.
Un portavoz de la Policía local confirmó el número de víctimas mortales a la agencia estatal bangladeshí BSS, tras asegurar que los equipos de rescate han recuperado en las últimas horas 27 nuevos cadáveres.
El siniestro, la mayor tragedia industrial de la historia del país asiático, también causó heridas de diversa consideración a 2.437 personas que se encontraban en el inmueble de nueve plantas y ubicado en la localidad vecina a Dacca de Savar.
Un número indeterminado de trabajadores continúan en paradero desconocido, probablemente sepultados bajo la enorme masa de escombros, que el Ejército y otros servicios públicos se afanan en retirar desde hace casi dos semanas.
La Asociación de Fabricantes de ropa y Exportadores de Bangladesh (BGMEA) situó en 3.122 el número de empleados en las cinco fábricas textiles localizadas en el interior del edificio, aunque reconoció que la información fue actualizada por última vez a finales de 2012.
Otras fuentes, sin embargo, elevaron el número de trabajadores a 4.000, como la Federación Nacional de Trabajadores del sector Textil de Bangladesh (NGWF).
Cuando el edificio se colapsó, los empleados del sector textil que se hallaban en su interior habían sido obligados a trabajar, pese a que la policía había advertido un día antes de la tragedia sobre la existencia de grietas en las paredes.
Las autoridades han apuntado como causas de la tragedia a cuatro generadores situados en el techo del inmueble, a la maquinaria industrial usada en su interior y la baja calidad de los materiales del edificio.
Bangladesh es el país del mundo con costes más baratos en la industria de la ropa y por eso empresas de todo el mundo, incluida China, están trasladando parte de su producción al país asiático, de acuerdo con la Campaña Ropa Limpia.
La catástrofe ha conmocionado a Bangladesh y ha puesto de manifiesto las malas condiciones laborales y de seguridad que sufren los trabajadores de fábricas textiles en el país asiático que abastecen a multinacionales occidentales.
Las autoridades han detenido al dueño del inmueble -vinculado al partido gobernante en Bangladesh-, a varios propietarios de talleres textiles y a ingenieros municipales.
Las compañías internacionales Primark, El Corte Inglés, Bon Marche y Joe Fresh han confirmado producir en alguna de las empresas locales implicadas en el siniestro, y otras como Mango habían hecho pedidos de prueba en los talleres.