La diputada argentina del Parlasur, Milagro Sala fue considerada "jefa de una asociación ilícita" y acusada de quedarse con US$1,58 millones destinados a viviendas sociales.
La Justicia argentina condenó este lunes a 13 años de cárcel a Milagro Sala por el desvío de fondos destinados a la construcción de viviendas. La diputada del Parlasur y dirigente de la organización política argentina Tupac Amaru fue también inhabilitada de forma absoluta al ser considerada "jefa de una asociación ilícita" por el Tribunal Oral en lo Criminal 3 de Jujuy, que dio este lunes a conocer la sentencia en el juicio del caso conocido como "Pibes Villeros" contra la dirigente social y otros 29 imputados.
Según el Comité por la liberación de Milagro Sala, la diputada se enfrentaba, en principio, a "un pedido de prisión de 9 años por parte de la Fiscalía" en la causa por la que se investiga asociación ilícita, extorsión y defraudación al Estado.
El tribunal la considera además coautora de "fraude a la administración pública" y "extorsión en concurso real" y apunta a que se quedó con 60 millones de pesos (US$1,58 millones) que debían ser destinados a la construcción de viviendas sociales.
El marido de Sala, Raúl Noro, también fue condenado, así como la diputada provincial Mabel Balconte; la concejal Marcia Sagardía, y una decena de ex integrantes de cooperativas de trabajo que pertenecieron a la organización Tupac Amaru, y a la Red de Organizaciones Sociales. El Comité por la liberación de Milagro Sala confirmó a Efe que la defensa apelará la sentencia.
La líder de la organización social se encuentra en prisión preventiva desde hace tres años y también está acusada de fraude por la construcción de más viviendas sociales, así como por la que entró en prisión en enero de 2016, la del escrache al actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, en 2009.
El pasado mes, la Corte confirmó la condena a tres años de cárcel por esta última causa, pero la absolvió de la acusación de acordar con un sicario un intento de asesinato a Alberto Esteban Cardozo, de la organización vecinal Tekuré, en unos hechos conocidos como la "balacera de Azopardo".
"Los negros que tenemos una camioneta y una casa somos corruptos y delincuentes. Por qué no vamos a ver a los hijos de Gerardo Morales o a los funcionarios, que en menos de tres años ya han cambiado cuatros veces de vehículos. Vayan a ver las tierras que se compraron, las casas. Y ahí vamos a ver quiénes son los corruptos", dijo antes de escuchar el veredicto la diputada en una controvertida rueda de prensa.
"Los jueces fueron apretados por Morales para que nos dicten una condena a todos nosotros. Y todos los compañeros son inocentes, no robaron nada. Lo único que hicieron fue buscar dignidad y vivir un poquito mejor", dijo. "Así que, queridos periodistas, ustedes son parte de la burocracia y son ustedes los responsables de implementar la Justicia en nuestra provincia", culminó Sala.