Los incidentes, que por el momento se han saldado sin víctimas, han afectado al sistema de transporte en la ciudad debido a "actos de sabotaje". Peñalosa ha declarado además la 'ley seca" hasta el mediodía del sábado.
El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, ha anunciado este viernes la declaración del toque de queda en tres áreas de la capital del país debido a los disturbios registrados en el marco de una nueva jornada de movilizaciones.
"Vamos a establecer el toque de queda en tres localidades, en Bosa, en Kennedy y Ciudad Bolívar a partir de las 20.00 horas (hora local)", ha señalado, en declaraciones a la prensa.
Así, ha detallado que la medida afecta a estas áreas "porque es donde se han concentrado los actos delincuenciales en el día de hoy". "Nosotros estamos haciendo todo para garantizar el funcionamiento de la ciudad", ha remachado.
Los incidentes, que por el momento se han saldado sin víctimas, han afectado al sistema de transporte en la ciudad debido a "actos de sabotaje". Peñalosa ha declarado además la 'ley seca" hasta el mediodía del sábado.
La ciudad de Bogotá se encuentra dividida en un total de 20 áreas, llamadas localidades. Las de Bosa, Kennedy y Ciudad Bolívar se encuentran situadas en la zona suroeste de la capital.
El ministro de Defensa de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, ha confirmado este mismo viernes que al menos tres personas han fallecido en las protestas que se produjeron durante la huelga general que tuvo lugar el jueves en el país.
Trujillo ha explicado que dos de las muertes se produjeron durante enfrentamientos con la Policía en los municipios de Buenaventura y en Candelaria, ambos en el departamento de Valle del Cauca (suroeste), al intentar detener varios saqueos en zonas comerciales de la zona. La tercera de ellas no ha sido detallada.
"Entre ayer y hoy fueron capturadas 98 personas, 207 más fueron conducidas a estaciones de Policía para su protección, ocho menores fueron aprehendidos y se llevaron a cabo 53 allanamientos en cumplimiento de las ordenes de la Fiscalía", ha detallado el ministro durante una rueda de prensa en la Casa de Nariño.
LA OEA CONDENA LA VIOLENCIA
Por su parte, la Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) ha condenado los actos de violencia registrados durante la semana pasada en Colombia y ha aplaudido la "corrección cívica" de aquellos que se manifestaron "en paz y armonía".
"Del mismo modo, reconocemos el apego a las instituciones y al Estado de Derecho del Gobierno del presidente Iván Duque para conducir al país en el marco de principios de respeto, desarrollo y progreso", ha indicado en un comunicado.
En el mismo, ha recordado que "el derecho a la protesta pacífica y la libertad de expresión forman parte de los valores fundamentales de nuestra región y así deben ser siempre respetados".
Sin embargo, la OEA ha recalcado en su comunicado que "el derecho a la protesta pacífica no puede servir para amparar actos de vandalismo ni acciones violentas contra bienes públicos y privados".
LA HUELGA GENERAL EN COLOMBIA
La marcha fue convocado el jueves por sindicatos, jubilados, profesores y estudiantes, colectivos indígenas y LGTBI, para protestar contra el Gobierno de Duque y sus políticas económicas, las cuales, según denuncian estos colectivos, han depauperado la esperanza de vida en el país.
El deterioro de las pensiones y los salarios, el incumplimiento de los acuerdos con los estudiantes, y la perenne situación de violencia que vive el país --más de 160 dirigentes sociales y sindicales han sido asesinados en lo que va de año--, así como el intento del Gobierno de modificar el acuerdo de paz con las FARC en 2016, son los principales puntos de las movilizaciones.
Los días previos a la huelga, el Ejecutivo otorgó plenos poderes a las autoridades locales y regionales para imponer las medidas necesarias en caso de que se produjeran actos de violencia y revueltas similares a las acontecidas en las últimas semanas en las principales ciudades de algunos de los países de la región, como Ecuador, Chile y Bolivia.
"La protesta social pacífica es un derecho constitucional, el cual garantizamos, pero seremos implacables con los actos de vandalismo", alertó Duque, en cuyas medidas para la huelga se incluía incluso el toque de queda, en caso de que alcaldes y gobernadores así lo considerasen.