Las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Francia y Rusia, y la doble transición de poder en las altas esferas del Partido Comunista chino serán parte de la incertidumbre.
Londres. El próximo año contiene, tal vez, la más amplia gama de riesgo político para la economía mundial en la historia reciente.
Con elecciones y cambios de liderazgo en los países más poderosos, Europa en crisis, agitación en Medio Oriente y el empeoramiento de las dificultades económicas impulsando la inestabilidad y descontento en todas partes, 2012 podría ser tan volátil como el 2011, si no peor.
El año en curso podría aún llevar un aguijón en su cola, con las preocupaciones sobre el euro y el nerviosismo ante un posible ataque israelí sobre Irán, para mantener a los mercados financieros y a las autoridades en vilo todo el resto del año.
Más de tres años después de que el colapso de Lehman Brothers llevó a la peor crisis financiera desde la Gran Depresión, las agitaciones económicas parecen estar impulsando la convulsión política en lo que podría convertirse en un circuito de retroalimentación particularmente perturbador.
Tensiones económicas -desde alzas de precios de los alimentos al empeoramiento de las dificultades económicas en el mundo desarrollado- estuvieron en el centro de muchas historias políticas de 2011. Mientras se intensifican, la volatilidad política, el estancamiento, la confrontación y el conflicto -sea local o internacional- parece que van a empeorar.
"Va a empeorar antes de que mejore", dijo Jonathan Wood, analista de emisiones globales en la consultora de riesgo Control Risk, con sede en Londres. "Si se ven cuáles han sido los eventos conductores este año, ninguno de esos factores se ha ido y muchos de los conductores económicos aún están creciendo".
Las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Francia y Rusia, y la doble transición de poder en las altas esferas del Partido Comunista chino se sumarán a la incertidumbre. Puede que se les haga complicado a los líderes políticos encontrar compromisos o sacar adelante decisiones políticas difíciles.
¿Estancamiento creciente? Esto, advierten muchos analistas, trae consigo un creciente riesgo de estancamiento político que viene justo cuando el mundo más necesita de liderazgo. El fracaso del "súpercomité" de Estados Unidos para acordar formas de reducir el déficit presupuestario puede ser una señal de lo que vendrá a nivel interno en muchos países.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, enfrenta una dura reelección contra quien sea que los republicanos escojan para enfrentarlo, debido a una deprimida economía, un desempleo de 8,6% y una contracción de la clase media debido a bajas de precios de viviendas y acciones.
En lo más alto de la lista de riesgos 2012 para muchos analistas es la no resuelta crisis de deuda de la zona euro.
Si el bloque de 17 países sobrevive en su forma actual, sus miembros tendrán que enfrentar duros ajustes económicos y reformas políticas.
Mientras los líderes de la zona euro y algunos países europeos no asociados accedieron a forjar una integración fiscal más estrecha, con una disciplina presupuestaria más estricta en una cumbre, el resultado no fue suficiente para garantizar la supervivencia del euro.
"El riesgo más grande es obviamente la zona euro, pero también podría ser el riesgo que se solucione de manera más rápido", dijo Alastair Newton, una ex autoridad gubernamental británica, ahora analista político en jefe en el banco japonés Nomura.
"Pero incluso si eso ocurre aún tendremos un crecimiento económico muy bajo y un alza en la conflictividad social en la zona sur del bloque euro en particular y en Europa en general. Incluso en el mejor escenario, 2012 luce muy difícil", añadió.
Para otros, Medio Oriente sigue como la más importante área a observar para potenciales trastornos a la economía global.
Casi un año después del comienzo del movimiento democrático "Primavera Árabe", la región sigue en proceso de cambio político con partidos islamistas no probados ganando poder en el norte de África y el levantamiento de Siria girando lentamente hacia una guerra civil.
Conflicto, malestar. Después de la caída de varios veteranos regidores árabes apoyados por occidente, el retiro de las fuerzas de Estados Unidos desde Irak es visto como la última señal de la decreciente influencia de los poderes de occidente en una región que dominaron por alrededor de 200 años.
En el vacío resultante, poderes regionales como Turquía, Arabia Saudita, y un aislado y tal vez más errático Irán, aparecen en una creciente confrontación abierta.
La inteligencia occidental estima que Irán se acerca a que una viable arma nuclear tenga una línea de tiempo más corta, y algunos analistas dicen que 2012 podría ser el año cuando los enemigos del Teherán decidan ir más allá del sabotaje encubierto, con un ataque militar que podría provocar represalias contra suministros de petróleo en el golfo.
"El imprevisto más grande que podría ocurrir es el de un ataque israelí en las instalaciones nucleares de Irán y en elementos de control del régimen" dijo Thomas Barnett, estratega en jefe de la consultora de riesgo político Wikistrat, agregando que ni el liderazgo de Israel o el iraní lucen dispuestos a dar marcha atrás.
"La configuración acá es de temer (...) algo tiene que ceder en esta ecuación estratégica", añadió.
Aún si es que el mundo evita un choque devastador como una guerra en Oriente Medio o un colapso europeo, muchos analistas temen que el negocio de los políticos y las autoridades económicas podría ser cada vez más difícil alrededor del mundo.