Los índices de aprobación del Gobierno de Michel Temer están en el menor nivel para un ejecutivo federal en 28 años, según un estudio publicado el sábado, tras revelaciones hechas por ejecutivos de JBS que dejaron al presidente brasileño en el centro de una crisis política.
Los índices de aprobación del Gobierno de Michel Temer están en el menor nivel para un ejecutivo federal en 28 años, según un estudio publicado el sábado, tras revelaciones hechas por ejecutivos de JBS que dejaron al presidente brasileño en el centro de una crisis política.
Un sondeo de Datafolha publicado en el diario Folha de S.Paulo mostró que apenas un 7%o de los entrevistados cree que el gobierno de Temer es bueno o muy bueno, el porcentaje más bajo desde el 5% que obtuvo el ex presidente José Sarney en 1989.
El estudio mostró que un 69% evalúa la gestión de Temer como mala o muy mala, mientras que un 23% de los entrevistados la consideró como regular. Datafolha entrevistó a 2.771 personas entre el 21 de junio y el 23 de junio.
En la encuesta anterior, realizada en abril, cuando todavía no se había difundido la grabación de una conversación entre el empresario Joesley Batista, da JBS, y Temer, el porcentaje de quienes consideraban que la gestión de Temer era mala o muy mala era del 61%. Quienes la consideraban buena o muy buena alcanzaban al 9%.
Las declaraciones de Batista, parte de un acuerdo de delación compensada, podrían permitir a la Procuraduría General de Brasil denunciar a Temer por corrupción, obstrucción a la justicia y organización criminal.
El estudio de Datafolha también mostró que un 65% de los consultados opina que la salida de Temer sería lo más beneficioso para el país. Un 30% estimó que es mejor que el mandatario siga en el cargo.
Consultados sobre una posible renuncia de Temer, un 76% se mostró a favor a esa opción, contra un 20% que la rechazó. Si el presidente no presenta su renuncia, un 81% apoyaría un juicio político en su contra.
Respecto a cuál sería la mejor opción si Temer dejara el cargo, un 83% de los entrevistados señaló que el mejor camino sería una elección directa, mientras que un 12% preferiría una elección indirecta por medio del Congreso.