El canciller de la nación sudamericana reafirmó ante la entidad “los derechos soberanos irrenunciables” sobre ese territorio y denunció el “corte belicista” de las declaraciones británicas sobre el tema.
Nueva York. El Comité de Descolonización de las Naciones Unidas aprobó con el apoyo de países latinoamericanos, una resolución instando a los gobiernos de Argentina y el Reino Unido a "afianzar el proceso de diálogo y reanudar las negociaciones para encontrar una solución pacífica" a la discusión sobre la soberanía de las Islas Malvinas.
El embajador de Chile, Octavio Errázuriz patrocinó un proyecto de declaración en el organismo, que fue apoyado con intensos discursos por países de la región como Venezuela, Uruguay, Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua, México y Brasil.
El diplomático chileno afirmó que “mi país apoya decididamente los derechos de soberanía argentinos sobre las islas Malvinas" y tanto él como los demás representantes de América Latina se refirieron al tema como una "herida profunda en nuestro continente", señaló Telam.
Al respecto, el embajador uruguayo ante las Naciones Unidas, José Luis Cancela, dijo que “esta rémora colonial que ofende a la Argentina, ofende también a toda la América Latina", dijo.
Declaración de Argentina. Previamente, el nuevo canciller argentino, Héctor Timerman, advirtió ante el Comité que las exploraciones petrolíferas que empresas británica están haciendo en las Islas Malvinas ponen en riesgo el medio ambiente.
Asimismo denunció el “corte belicista” que a juicio de Argentina tendrían las declaraciones británicas sobre el tema.
Timerman afirmó ante el organismo de la ONU que “en mi primera tarea como ministro de Relaciones Exteriores, tengo el honor y el privilegio de venir al seno de este Comité para reiterar frente a la comunidad internacional una vez más los derechos soberanos irrenunciables e imprescriptibles de Argentina sobre las Islas Malvinas".
Explicó que la situación "se vio agravada por la decisión unilateral e ilegal" de hacer exploraciones de recursos naturales no renovables en la zona.
Al respecto puntualizó que ello constituye una "amenaza ambiental no sólo para Argentina sino para el resto de los países del sur de América Latina", dijo Telam.
En este punto, el ministro argentino solidarizó con Estados Unidos por el derrame de petróleo que se ha producido en sus costas y enfatizó en este contexto que en el caso de las Islas Malvinas “no debemos minimizar el riesgo que desde el punto de vista ambiental supone esta aventura colonialista. Se trata de una rapiña de recursos naturales no renovables a miles de kilómetros de sus fronteras”.
Además, el ministro argentino denunció la "presencia militar de envergadura que el Reino Unido detenta ilegalmente con su base en Malvinas" y manifestó la "inquietud" del gobierno de Cristina Fernández por las "declaraciones de corte belicista del gobierno británico incluyendo a sus representantes en las islas".
Según Timerman, el Reino Unido "se considera por encima de los llamados de la comunidad internacional y desdeña la opinión de las Naciones Unidas que se arroga de ser el único árbitro sobre si se va negociar y manifiesta no estar dispuesto a hacerlo".
Agregó que resulta "inadmisible" la postura británica y "poco creíble" su discurso. Según el ministro esta situación es "aún más preocupante por ser miembro del Consejo de Seguridad que busca la preservación de la paz y la seguridad internacionales".